Crece la preocupación, nos comentan, sobre cómo se distribuirán las vacunas ahora que comience un proceso masivo de aplicación, ya no sólo al personal médico, sino a la población general. La intención, se teme, es que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador querrá utilizar las vacunas como parte del botín político para ganar la Cámara de Diputados en las elecciones venideras. Y para muestra, un botón. Este viernes, durante la reunión de la Comisión de Salud de la Conago, el secretario Jorge Alcocer y el subsecretario Hugo López-Gatell escucharon una propuesta de los gobernadores del PAN, presentada por Carlos Joaquín González, de Quintana Roo: que sea el Sistema Nacional de Vacunación el que lleve a cabo la distribución y aplicación de la sustancia. ¿La respuesta? Silencio. Ninguna reacción por parte de los funcionarios. ¿Algo sabrán? La estructura paralela al gobierno que entregará las vacunas pinta para ser el nuevo frijol con gorgojo. Publica «Bajo Reserva» de El Universal