MARCA

 

Al final dramático. Hasta ahí llevó el partido el equipo de River Plate en la casa del Palmeiras. La escuadra de Marcelo Gallardo se quedó a un gol, a una mala decisión del VAR de poder llevar el juego a los penales e incluso ganarlo, pues se les revocó una anotación y una pena máxima que dejó un marcador global final de 3-2, en favor del conjunto brasileño que regresa a la final de la Copa Libertadores.

Un inicio y un final vertiginoso, que poco a poco fue dejando al ‘Verdao’ paulista sin acciones peligrosas, pues poco a poco el cuadro argentino se adueñó de las acciones. Esto se reflejó al 29′, con la anotación de Robert Rojas con un potente cabezazo, en un servicio que cayó del tiro de esquina, para darle esperanza a los suyos.

Minutos de tensión, de choque, hasta que River puso la balanza a su favor cerca del final del primer tiempo, con el tanto de Rafael Santos Borré en el 43′, en una acción que nació desde un saque de banda por la derecha. De la Cruz mandó un centro que peleó Suárez en el área, pero que le cayó al colombiano, que empujó en el área chica para el 0-2 y 3-3 global.

El segundo tiempo fue completamente para los argentinos, que rápido buscaron igualar las cosas, algo que se había conseguido en el 51′, cuando Gonzalo Montiel marcó un golazo de volea, en un servicio desde la izquierda; sin embargo, llegó el VAR a apagar la fiesta. Luego de hasta tres minutos de revisión, el silbante confirmó un fuera de lugar previo al centro que derivó en la anotación.

River Plate se quedó por primera vez en el cotejo con las manos vacías, pero el empuje no decayó.

Weverton y el área del Palmerias comenzaron a pintarse blanco y rojo, pues las unidades de River apedrearon la cabaña brasileña, donde el propio arquero fue figura, así como los centrales para rechazar el peligro.

Pero fue en el 76′ cuando la polémica se desató. Matías Suárez aparentemente había sido derribado por Alan Empereur en el área y el propio árbitro así lo apreció, pues señaló el punto penal sin dudarlo dos veces.

Pero llegó el VAR, una última pero decisiva vez. El colegiado paraguayo visitó el monitor para ver una y otra vez en cámara lenta la acción y al final, ahogó el grito de emoción de River Plate al anular su propia decisión.

Con un River volcado al frente, con un hombre menos tras la expulsión por doble amarilla de Robert Rojas, el ‘Millonario’ hizo que Weverton fuera figura y que el ‘Verdao’ jugara metido en su área. Al final y a pesar de tener nueve minutos extra en el tiempo agregado, no alcanzó y se pierden de la gran final de la Copa Libertadores.

Palmeiras, 10 años después, jugarán una final de Libertadores, donde podrían tomar venganza de Boca Jrs por la edición del año 2000, o jugar ante el Santos, vecinos en la ciudad de Sao Paulo, por la gloria continental.