A los que les cayó una segunda buena noticia en la semana fue a los restauranteros que operan en la Ciudad de México, pues resulta que las plataformas de envío de alimentos aceptaron bajar los cobros de comisiones que les hacían por cada entrega y que rondaban el 30 por ciento. Nos comentan que la gestión del gobierno de la Ciudad, a cargo de Claudia Sheinbaum, al final fructificó y empresas como Uber Eats, Didi y Rappi se ajustaron en algunos casos a cobrar casi la mitad de las tarifas que antes tenían. Un gesto de solidaridad con el gremio restaurantero, que aporta una buena cantidad de empleos, y que apenas esta semana pudo abrir con aforos reducidos y bajo condiciones más estrictas. Se lee en «Rozones» de La Razón de México