*Telmex pretende eliminar la jubilación a los trabajadores de nuevo ingreso

Manuela V. Carmona/corresponsal en Orizaba y municipios de las Altas Montañas

Orizaba, Ver., 19 de agosto de 2020.- Más de 150 trabajadores de la Sección 8 del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM), se unieron este miércoles al paro nacional en defensa del contrato colectivo de trabajo 2020-2022.

Fue desde las 08:00 horas que los trabajadores sindicalizados de la región de Orizaba al servicio de Telmex, se apostaron en las entradas de los centros de trabajo ubicados en la avenida Circunvalación y Sur 15 donde está la tienda comercial.

En esta ciudad, al igual que en Xalapa, Veracruz y otros municipios del estado, de manera conjunta se unieron para exigir una respuesta en la manifestación de brazos caídos que pretenden mantener mientras dure la jornada laboral, a la espera de una repuesta al mediodía de este miércoles.

Y es que desde el martes, a través de un comunicado, el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana anunció que este 19 de agosto realizará una falta colectiva nacional en defensa del Contrato Colectivo de Trabajo, ya que la empresa Telmex no muestra voluntad para cumplir con la negociación contractual, además de querer eliminar la cláusula 149 del contrato referente a la jubilación de los trabajadores telefonistas de nuevo ingreso.

Exponen que la empresa ha enfatizado su difícil condición económica y la baja en sus ingresos derivado de la regulación; sin embargo, “estamos convencidos de que esta situación es un evento transitorio, por lo que los telefonistas no estamos dispuestos a sacrificar el futuro de los telefonistas de nuevo ingreso al retirarles su derecho a la jubilación, conquista sindical qué significa el resultado de luchas históricas de nuestra organización”.

Asimismo hicieron saber que están conscientes de la importancia de los servicios de telecomunicaciones y más durante tiempos de pandemia; sin embargo, la defensa de los derechos laborales de los trabajadores también significa una prioridad.

“No podemos seguir consistiendo la manera en que la empresa se está aprovechando de una situación tan delicada para presionar a la base trabajadora en el sentido de que seamos los telefonistas los que paguemos por algo que no es nuestra culpa, pues esta situación es causa de la regulación intrusiva emitida por el IFT y las malas decisiones tomadas por la dirección de Teléfonos de México”.