Guanajuato recibió el domingo una de las mejores noticias en años.

La captura de El Marro abre la oportunidad real de devolverle a esa entidad la paz perdida. Por fin está detenido el líder de una banda criminal despiadada que fincó su poder en la corrupción y la violencia en el entorno de la refinería de Salamanca.

No se regatea el reconocimiento a las fuerzas armadas y al personal de fiscalía estatal que participaron en el operativo de captura. El gobierno federal y el estatal perdieron demasiado tiempo en interminables jaloneos políticos. Unieron fuerzas y entregaron resultados. Eso queda de lección.

Lo que sigue es que el personal encargado del papeleo jurídico no cometa ni un error técnico que le abra una rendija a la impunidad.

Un debido proceso impecable hará posible que el detenido se atenga a las consecuencias de sus actos atroces y deje ser un peligro para la sociedad.   |   Se destaca en “Pepe Grillo” de La Crónica.