Si hay un personaje al que el PRI en Veracruz y a nivel nacional no le deben absolutamente nada, es a Héctor Yunes Landa, quien tuvo su oportunidad como candidato a la gubernatura del Revolucionario Institucional  y perdió frente a su primo-hermano hace cinco años.

Él podrá argumentar que lo traicionaron y que el pésimo gobierno de Javier Duarte de Ochoa fueron factores para morder el polvo, sin embargo, desde que se inventaron los pretextos se acabaron los pende…, el triunfo lo tuvo en las manos, pero esa soberbia que lo acompaña y el confiarle a seres queridos y su gris equipo la estrategia de su campaña fue lo que ocasionó que quedara en segundo lugar.

No obstante, el exfuncionario fidelista tiene desde hace años a sus “borreguitos” en el PRI –decimos “borreguitos” para no escribir una grosería que empieza con pen y termina en os-, a quienes les tiene tomada la medida, los bulea, los intimida, los escupe, los trata con la punta del pie, los reta, les dice que él manda y nadie le hace frente, son serviles y agachones ante este mezquino político.

Don Yunes Landa hace tres años se agandalló tres diputaciones plurinominales: una para él (federal), otra para su hija –la incrustó por el PVEM- y otra curul local para su mozo Jorge Moreno Salinas; en esta ocasión va a repetir la dosis, “negoció” mejor dicho arrebató la diputación local plurinominal número uno del  PRI, está negociando para incrustar a su heredera en otra plurinominal federal y le ha prometido su principal sirviente que le darán un cargo en la próxima legislatura.

A pesar de ser un consumado ingrato a los colores del tricolor, pues Héctor Yunes ha conformado un nuevo partido político en Veracruz que regentea un político sureño y su comadre del alma, membrete que buscan desesperadamente no pierda el registro para que en el 2024 les sirva como satélite del PRI y él sea otra vez candidato a la gubernatura, aunque pierda, pero el “ñor” está obsesionado y seguirá actuando igual de gandul. Cría cuervos y te sacarán los ojos. Están avisados en el PRI. De nada.