En el puerto de Veracruz un policía municipal mató por “accidente” a un joven; los familiares afirman que es mentira, que hubo dolo, que el muchacho fue asesinado por el uniformado. El alcalde, Fernando Yunes, fiel a su costumbre se justifica y sólo se ofreció a pagar los servicios funerarios del fallecido.