Fiel a su estilo y su costumbre, el choleño amaga, recurre al chantaje y de nueva cuenta muestra su distintivo de ingrato.

Vergüenza le debería de dar asomar sus ambiciones electorales antes de tiempo, lo suyo es la arrogancia, sin mencionar la mecha tan corta que tiene, lo represivo y atravesado que es.

Por supuesto que el representante popular se encuentra en todo su derecho de mostrar sus aspiraciones, aspiraciones, yo diría ambiciones, de las cuales ya muchos veracruzanos conocen, ya están enterados.

No es la primera vez que el primo del vecino de El Estero muestra el cobre, como tampoco es el inicio de sus felonías al tricolor. A ese noble instituto político que le ha dado riqueza, poder político y económico, el partido político al que ha despojado de cargos públicos para entregarlos en bandeja de plata a su familia, un instituto político que le dio notoriedad. ¿Y qué es lo que Yunes Landa le ha dado al tricolor?, al PRI solo le ha dado traiciones, estocadas por la espalda. Yunes Landa ha sido porción importante para que el electorado le pierda la confianza al tricolor, sus acciones han provocado que las bases priistas se alejen, que fijen la óptica en otras opciones electorales.

Yunes Landa se ha olvidado por completo en trabajar a favor del tricolor, en revivir las bases, los sectores, en reconquistar la confianza del electorado.

En pocas palabras le ha valido madre el partido.

Así de sencillo.

Por lo mientras, y una vez que ha visto más que mortecino al PRI, Yunes Landa se ha dedicado a iniciar su propio negocio, perdón su propio partido político. Espacio que, una vez logrado, habrá de actuar en forma autoritaria, comportándose como todo un auténtico dictador egocéntrico.

Seguramente, y sin temor a equivocarnos, el electorado priista veracruzano solo está esperando esta gran oportunidad para cobrarle, de nueva cuenta, la factura al primo de Miguel Ángel. No lo dude que otra vez lo hagan morder el polvo.

Recordemos que Yunes Landa es un político perdedor, un político represivo, atravesado. Claro ese actuar lo asume ante los débiles, ante el desprotegido, porque con la clase política pudiente es manejable, dócil, doméstico.

Por cierto, no se equivoca el tuxpeño, Inocencio Yañez Vicencio al retarlo públicamente a un debate, acción que desde luego el choleño le habrá de rehuir, pues está cierto que además de que el paisano de Reye Heroles goza de una cabal salud moral, no es una perita en dulce, que no habla solo por hablar. Aquí sí encontró la horma de su zapato.

Doble contra sencillo a que Héctor no le atora.

Salud.