* Se les brindaron servicios médicos, de belleza, corte de cabello, alimentación, y los sacerdotes confesaron a las personas de la tercera edad
* El párroco José Ayala Madrigal afirmó que no se les puede olvidar y que, en estas fechas, debemos cuidarlos
Enrique Burgos
Coatzacoalcos, Ver., 20 de diciembre del 2024.- Los adultos mayores son una parte importante de la sociedad; su experiencia contribuye al desarrollo de las futuras generaciones. Se les debe respeto y merecen nuestra ayuda.
El párroco de la iglesia del Carmen, José Ayala Madrigal, afirmó que no se les puede olvidar y que, en estas fechas, debemos cuidarlos.
En el templo se celebró una posada navideña en la que se brindaron servicios médicos, de belleza, corte de cabello, alimentación, y los sacerdotes confesaron a las personas de la tercera edad.
«Invitamos a nuestros hermanos, a los viejos no los podemos olvidar. Siempre un apapacho es muy bueno, sobre todo a nuestros viejos, que son los que más atendemos, y los que a veces, según nuestros criterios, parecen ofrecer poco. Se les da lo que necesitan: medicamentos, se les toma la presión, la glucosa, todas aquellas cosas que requieren, su corte de pelo, sus uñitas. En un momento más los estamos confesando con el padre Sergio, que también es un servicio que les estamos ofreciendo. Es una condición de vida que debemos afrontar, pero desgraciadamente, los viejos, según los criterios del mundo, no producen y no dan; están siendo invisibles», declaró.
Los abuelitos agradecieron poder contar con el apoyo de la comunidad en general, ya que se atendió a todos los que necesitaron ayuda, sin importar su religión.
“No les ponemos atención a los adultos mayores, los dejamos y nos enojamos. Pienso que hay que tenerles paciencia. Hacen algo y uno se enoja, pero sobre todo, lo que hay que tener es paciencia”, consideró el señor Jorge Zúñiga, quien acudió por un corte de cabello.
