En los últimos días ha estado sonando con bastante fuerza el hecho de que el banco Banamex podría ser comprado por parte del gobierno del estado, una noticia que sin duda alguna parece agarra cada vez más fuerza.

La administración pública a través del tiempo que lleva el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha adquirido diferentes activos como lo es la refinería de Texas, la cual resultó de un increíble éxito, la compra de las platas energéticas por parte de Iberdrola, entre otras.

Por estas acciones y por las diferentes inversiones que aparecen por parte del Estado para diferentes proyectos, como lo es la refinería de Dos Bocas, o el Tren Maya no parece nada descabezado, que en estos momentos se piense en adquirir uno de los bancos más conocidos e importantes del país.

Ahora bien, por lo mencionado con anterioridad y por la forma en que se están manejando diferentes temas por parte del gobierno, parece coherente pensar que se está buscando una monopolización por parte pública.

¿A que viene esta idea?

Esto se debe más que nada por el hecho de que el gobierno al adquirir la refinería de Texas, así como el mantenimiento de las refinerías existentes en el país, se comienza a haber autosuficiencia, por otro lado la compra de Iberdrola aparece un incremento considerable del abastecimiento de la CFE, teniendo mayoría.

El adquirir uno de los bancos más importantes por parte de México implicaría que el gobierno tuviera mayor influencia a nivel estado, de por sí la tiene, ya que maneja el tema de impuestos, con esto generaría una dependencia por parte del gobierno.

Entonces, ¿la adquisición es buena o mala?, parece algo realmente fácil de decir, pero intervienen demasiados factores, buena por parte del desarrollo del gobierno, y que las ganancias quedarían en el país, no obstante existiría cada vez más una dependencia mayor de la que existe por parte del gobierno, y que sin duda alguna, parece ir al camino del comunismo.