«Qué cosas tiene la vida, Mariana, qué cosas tiene la vida. Cuánto más alto volamos, nos duele más la caída», sentencia el gran Alberto Cortez en una de sus más hermosas canciones, y eso le viene como anillo al dedo al priista Yunes Landa.

Resulta que el exsenador y excandidato perdedor a la gubernatura del Partido Revolucionario Institucional en Veracruz, hoy estuvo en un evento de periodistas, así es, pues el choleño ya no sabe qué hacer para atraer los reflectores para llamar la atención.

Y durante el acto se acercó al junior Eduardo Vega Yunes a quien le gusta que le digan «Tato» -¿la sangre llama a la sangre?-, en donde dialogaron y llegaron a la conclusión de que están listos para las elecciones del año 2024.

Sólo que ya no se vio al mismo Héctor Yunes de hace unos años, a ese político bravucón que le daba por amedrentar periodistas, incluso, amenazarlos o al senador soberbio que sentía que la tierra no lo merecía, ahora ya hasta se ve modosito y rogón.

Para muestra la siguiente imagen, en donde Héctor tiene sus manos cruzadas y el dirigente de Fuerza por México en Veracruz lo escucha con incredulidad y hermetismo.

Ni hablar Yunes Landa, quizá ha llegado el momento de darle paso a las nuevas generaciones en el priismo, ¿o acaso quieres ser un feo «dinosaurio» de esos que tiene en la nómina el mercenario de Marlon Ramírez?, o qué andas buscando, si tu oportunidad ya la tuviste y mordiste el polvo, lo único que deberías de hacer es tomar algún taller, curso o diplomado sobre comunicación corporal, porque tus poses actualmente dejan mucho que desear. Tan, tan.