Manuela V. Carmona

Orizaba, Ver., 6 de septiembre de 2022.- No existen las condiciones necesarias en el poder judicial para eliminar la prisión preventiva oficiosa debido a que prevalece la corrupción en el Sistema Penal Acusatorio, aseguró la abogada e integrante del Colectivo de Marea Verde de las Altas Montañas, Luz María Reyes Huerta.

Aunque dijo que se trata de un tema muy controvertido en situaciones de violencia de género se pone en riesgo a la víctima, si se deja por ejemplo libre al violentado. “En la experiencia que tenemos sobre todo con estos delitos (feminicidios y violencia por razón de género) que nos afectan mucho a las mujeres lo que ha prevalecido hasta el momento desgraciadamente es la impunidad».

Expuso que ejemplo de esta situación es el caso de Marlon Botas, porque basándose en el principio de presunción de inocencia en estos momentos estaría libre «y poniendo en peligro a otras mujeres que por desgracia cayeran en sus redes. Apenas también estaba viendo un video de un documental de las víctimas sobrevivientes de feminicidio en el cual se captó el testimonio de una de las víctimas que lograron afortunadamente sobrevivir a un intento de feminicidio y que ocurrió en Veracruz; 3 años después de que la hubiera intentado matar el agresor fue detenido por otra carpeta que había sido judicializada 3 años atrás, entonces, durante todo este tiempo el agresor estuvo en evasión de la justicia y pues imagínate estuvo a punto de caer esta chica y cuántas más pudieron o podrán estar en riesgo a partir de que les permitan tener acceso a su proceso en libertad».

Por ello considero que es de retroceso, pero más de alto riesgo para las víctimas; «es muy riesgoso y porque además no podemos cerrar los ojos ante una problemática que desgraciadamente y lo sabemos los abogados y las abogadas; que todavía prevalece mucho la corrupción en este sistema de justicia».

Y es que expuso que, aunque en materia de impartición de justicia se tienen avances, lo cierto es que también hay malas prácticas. «pero las malas prácticas desgraciadamente siguen estando presentes, entonces, cuántos feminicidas, cuántos violadores se van a poder sustraer de la evasión de la justicia ante esta apertura, ojalá y se reconsidere porque así como tienen derechos los agresores o los presuntos delincuentes también las víctimas para acceder a la justicia y parte de eso tiene que ver con qué el agresor, el responsable de un delito reciba el castigo que se merece y pues a veces no hay otra manera de garantizarlo solo si permanece de recluido mientras se lleva el proceso penal».