¡La rapiña no se llevó nada!
Tráiler cargado de cristales volcó en la carretera Xalapa-Perote a la altura de Tlacolulan
* La unidad se dirigía a Xalapa proveniente de Tlalnepantla
* Decenas de personas se congregaron con la intención de llevarse lo que pudieran pero se vio frustrada porque la mercancía que traía se hizo pedazos
Gildardo Lugo
Tlacolulan, Ver., 5 de mayo de 2025.- Fuerte accidente se vio registrado la mañana de este lunes cuando un tráiler cargado de cristal perdió el control y se volcó en el kilómetro 139 del libramiento Xalapa-Perote a la altura de la zona montañosa del poblado El Fresno en Tlacolulan. La unidad se dirigía a Xalapa proveniente de Tlalnepantla.
El accidente movilizó rápidamente a los Técnicos en Urgencias Médicas de Servicios Profesionales de Atención Prehospitalaria de Perote. Al llegar, encontraron al conductor —un joven de 31 años— visiblemente golpeado, pero fuera de peligro. Fue estabilizado en el sitio y no se requirió traslado hospitalario.
La situación, sin embargo, atrajo a una multitud inesperada: decenas de personas de la zona se congregaron con la intención de llevarse lo que pudieran.
Pero la escena que encontraron fue de puro desperdicio. Los cristales estaban reducidos a escombros, inservibles para cualquier propósito. La rapiña, una práctica cada vez más frecuente en accidentes viales en esta región, se vio frustrada.
Aunque las autoridades aún no han dado un parte oficial sobre las causas del percance, testigos comentaron que el tráiler pudo haber perdido el control en una curva cerrada, posiblemente por exceso de velocidad o fallas en el sistema de frenos. La pendiente y la carga frágil hicieron el resto.
Elementos de la Guardia Nacional División Carreteras, así como personal de COPEXA, acudieron a tomar conocimiento del accidente y a coordinar el cierre del carril que conduce a Veracruz.
La circulación quedó interrumpida por varias horas, generando caos vehicular y obligando a los conductores a tomar vías alternas.
Mientras los restos del cristal aún brillaban bajo el sol de media mañana, lo que quedó en claro fue la fragilidad de todo: del cargamento, del conductor, del sistema de transporte… y de la ética colectiva cuando huele a mercancía sin dueño.
