Después de la reducción sistemática al presupuesto que tuvo la Comisión Nacional Forestal durante todo el sexenio anterior, nos cuentan que hubo sorpresa por el anuncio que un grupo de ese organismo viajaría a Los Ángeles, California, junto con militares de la Sedena, para ayudar a sofocar los incendios que han azotado la zona. Desde dentro de la Conafor nos comentan que está muy bien la solidaridad con el país vecino y que de paso se abrió la esperanza de que, con esta acción, el gobierno federal los voltee a ver y tome en cuenta el trabajo que hacen los apagafuegos en condiciones adversas y, sobre todo, el presupuesto que necesitan. | Se puede leer en “Bajo Reserva” de El Universal.