Pedro Luis Hernández de Paz, edil electo de Santo Tomás de los Plátanos, en el Estado de México, se nos volvió Houdini. Tomó protesta y, entre trifulcas, se escapó por segunda vez. Suena a comedia, pero es tragedia para un municipio que merece gobernantes presentes y no fugados. La operación Enjambre lo persigue, mientras amparos y acusaciones, desde secuestro hasta huidas de película, colorean su llegada al cargo. La historia no es nueva, pues el teatro político se llena de actores prófugos. Alguien debería recordar que la ley también debe tomar protesta. Una mala noticia para Hernández de Paz, no llegará muy lejos. | Se detalla en “Frentes Políticos” de Excelsior.