La obsesión por aparecer un día sí y otro también en los medios para que no decaiga entre sus seguidores el entusiasmo por el regreso a la Casa Blanca, hace que la cadena disparates de Donald Trump tenga cada día un nuevo eslabón.

El más reciente es un desplante para psicólogo porque propuso que México se convierta en un estado más de la Unión Americana. Igual y lo hace para ahorrarse su otra ocurrencia, la de las deportaciones masivas, porque al ser México el estado 51 ya no habría razón para expulsar a los migrantes mexicanos que en automático serían, como el resto de nosotros, ciudadanos estadounidenses. Ya no habría necesidad de tramitar visas.

México sería el estado más grande y poblado de EU, con mayor población que California, Texas y Florida juntos, por lo que su votación podría decidir quién sería presidente de ese país. ¿Habrá Trump reparado en eso? Ya veremos lo que se le ocurre hoy, porque con Donald nunca se sabe. | Se destaca en “Pepe Grillo” de La Crónica.