Peculiar que el regateo, tan usual en los tianguis, haya escalado hasta la Cámara de Diputados y el Consejo General del INE.

El instituto electoral hizo un análisis, dijeron que riguroso, sobre el costo de la elección de junio para jueces y magistrados, pero la cantidad solicitada espantó a dos palacios, el Nacional y el de San Lázaro, y entonces comenzó un jaloneo.

Tal parece que el análisis no fue tan riguroso porque ya encontraron la forma de reducirlo y hacerle una rebajita al cliente, que es el que pondrá sobre la mesa el dinero para los trabajos.

El encontronazo por el presupuesto para la elección es otra piedra en el accidentado camino de la Reforma Judicial que a decir por los muy pocos los aspirantes inscritos han tenido poco poder de convocatoria. | Se destaca en “Pepe Grillo” de La Crónica.