Sus familiares contaron a la prensa que la salud de la diputada Ifigenia Martínez, que venía siendo mala, colapsó a mediados de septiembre. La responsabilidad de entregarle la banda presidencial a la doctora Sheinbaum el primero de octubre la motivó para sacar fuerzas y estar presente en la ceremonia.
Al final del día primero de octubre estaba en su casa, dicen, plena de alegría y gratitud, con la satisfacción de deber cumplido.
Hoy se le rinde homenaje en el propio Palacio de San Lázaro que fue escenario de ese momento histórico en que una de las mujeres que abrieron brecha le entregó la banda a la primera mujer presidenta.
Ya había sido una jornada emotiva y ahora conmueve al saber que Ifigenia, una mujer con los más altos blasones académicos, políticos y de servicio público, se marchó muy pocos días después.
Lo dijo bien la presidenta, no llegó sola, llegaron todas, gracias a la lucha de mujeres de la talla histórica de Ifigenia. Descanse en paz. | Se destaca en “Pepe Grillo” de La Crónica.