Ana Guevara, titular de la Conade, se esconde tras un muro de justificaciones, mientras el deporte mexicano se desmorona a su alrededor. Durante su liderazgo, la comisión que debía apoyar a los atletas fracasó, y ha sido un desfile de excusas que no resuelven nada. Numeralia insensible, dice, como si los números fueran los que fallaron en el trampolín o el tatami. Las medallas, ésas que se prometieron con tanto alarde, se esfumaron en clavados, tiro con arco y taekwondo. Tal vez el verdadero problema no es el frío de las cifras, sino la falta de dirección y gestión adecuada. Al final, el deporte es esfuerzo y resultados, no palabras vacías. | Se detalla en “Frentes Políticos” de Excelsior.