Como si no fuera suficiente con la inseguridad, ahora los habitantes de Cuernavaca padecen una crisis de agua por los adeudos que tiene el Ayuntamiento con la CFE. Ayer, bajo la presión de los bloqueos, las autoridades acordaron pagar sólo una parte de lo que se debe, para que cesen los cortes a la energía de los pozos. Pero al parecer aún hay una deuda histórica por cerca de 296 millones de pesos, que dejaron las dos anteriores administraciones, encabezadas por Antonio Villalobos y… sí, Cuauhtémoc Blanco. El primero de ellos está en la cárcel, acusado de desvío de recursos. Y el segundo, bueno, suele estar ausente, aunque se sabe que ocupa el cargo de gobernador del estado. La pregunta es: ¿Qué pasará cuando la CFE se decida a cobrar esa deuda añeja? El lunes bajó el switch por una cantidad irrisoria, comparada con lo que aún le deben. Uf.   |  Se lee en “Rozones” de La Razón.