El Comercio

México., 23 de julio del 2022.- La Organización Mundial de la Salud ( OMS) ha activado este sábado su máximo nivel de alerta para tratar de contener el brote de viruela del mono, que ya ha afectado a casi 17.000 personas en 75 países, donde se han registrado cinco fallecidos.

Ante estas cifras, según ha anunciado el director general de la organización, Tedros Adhanom Ghebreyesus, «he decidido declarar una emergencia de salud pública de carácter preocupante de alcance internacional».

Esto supone reconocer que el riesgo en el mundo es relativamente moderado; en el caso de Europa, es alto. En España, de acuerdo a los últimos datos facilitados esta semana, se rozan los 3.000 casos, lo que lo convierte en el país con más contagios del mundo.

A pesar de las consideraciones del grupo de expertos de la agencia de la ONU encargado de evaluar la crisis, que todavía no ha alcanzado un consenso sobre esta cuestión, el jefe de la OMS ha decidido realizar esta declaración tras entender que el brote cumple con todos los requisitos necesarios para ello. «Tenemos un brote que se ha propagado por todo el mundo rápidamente, a través de nuevos modos de transmisión, sobre los cuales sabemos muy poco y que cumple con los criterios del Reglamento Sanitario Internacional», ha explicado en rueda de prensa.

Ghebreyesus ha asegurado, además, que, en términos generales, «la evaluación de la OMS es que el riesgo de la viruela del mono es moderado a nivel mundial y en todas las regiones, excepto en la región europea, donde evaluamos el riesgo como alto».

A pesar de esta declración y las elevadas cifras de contagios, el jefe de la OMS ha llamado a la calma y ha recomendado a los países que sigan el protocolo de contención establecido para esta clase de emergencias: «Con las herramientas que tenemos ahora, podemos detener la transmisión y controlar este brote», ha afirmado.

También ha detallado que, «de momento, se trata de un brote que se concentra entre hombres que mantienen relaciones homosexuales, en especial con compañeros múltiples», aunque ha recordado que «el estigma y la discriminación son tan peligrosos como cualquier virus». Por esto, «además de nuestras recomendaciones a los países, también hago un llamado a las organizaciones de la sociedad civil, incluidas aquellas con experiencia en el trabajo con personas que viven con el VIH, para que trabajen con nosotros en la lucha contra el estigma y la discriminación», ha declarado.