Y son familiares de los marinos Óscar Manuel González Andrade y Victoriano Rodríguez Zurita, desaparecidos hace cerca de cuatro meses, quienes siguen en espera de que el senador José Narro Céspedes les explique el paradero de los dos elementos que estaban comisionados a la seguridad municipal de Acapulco, pero a quienes la administración de la alcaldesa de Acapulco, Abelina López Rodríguez, le envió para que fungieran como guardaespaldas del legislador durante eventos de promoción de la revocación de mandato en los primeros días de marzo. Y es que las familias de los agentes se siguen preguntando cuál será el argumento del legislador morenista para aclarar no sólo el abuso del poder en que incurrió al disponer de dos elementos para que lo acompañaran a actos políticos del 3 al 6 de ese mes, sino la ubicación actual de éstos. Tienen datos de que los elementos sí se habrían reportado con él en un restaurante de la CDMX.   |  Se lee en “Rozones” de La Razón.