No la pierda de vista. Aun cuando es nacida en el Distrito Federal, hoy Ciudad de México, tiene raíces veracruzanas. Su padre le brindó ese honor.

La subsecretaria de Bienestar, también tiene sus aspiraciones políticas. Téngalo por seguro que su aparición, el día de ayer en esta ciudad capital, acompañada de Manuel Huerta Ladrón de Guevara, no es producto de la casualidad.

Ya en repetidas ocasiones, pero todas ellas sin dar la cara a la prensa, bajo un total hermetismo ha pisado tierras veracruzanas. Se ha paseado, pero siempre con muy bajo perfil.

Hace unos meses, sin hacer ruido, estuvo en Chicontepec, el pretexto fue su labor como subsecretaria de Bienestar, lo curiosos es que su visita fue un fin de semana.

Es gente muy cercana al Marcelo Ebrad y ya ni se diga al dueño de “La Chingada”, siempre ha trabajado muy cerca de tabasqueño.

Es de los pocos personajes que gozan de la total confianza del señor López, quizá por ello es la responsable directa de varios de los principales programas sociales, como son el de Pensión para Adultos Mayores, y Tandas de Bienestar.

Aun cuando es joven su carrera política no tiene desperdicio, sabe desenvolverse, habla con mucha seguridad, cabila, no pierde el juicio mucho menos la agarran por sorpresa. Y como ella dice, toda su vida ha hecho política.

Una de sus virtudes es haber participado, a finales de los noventa, en el movimiento estudiantil de la UNAM, ya que al parecer fue allí donde perdió el miedo, esa experiencia le dejó muchas y muy buenas enseñanzas.

Tiene una excelente amistad con el regordete superdelegado veracruzano, han trabajado juntos y, lo más importante, crecieron al lado del hoy jefe del ejecutivo federal. Es tanta la querencia que le tiene al amorfo superdelegado que en una de sus visitas calificó su trabajo con un diez. Lo calificó como uno de los mejores del país.

Es madre de una pequeña de nombre Sofia, a la cual le brinda calidad de tiempo, ya fue diputada federal y local, cargos que desempeñó con total decoro, con alto sentido de responsabilidad.

Ciegamente obedece al tabasqueño, lo admira desde pequeña y ha leído varios de sus libros.

Por eso ahora que la mandan a pasearse a Veracruz y se presenta, ya en abierto, antes lo medios de comunicación, no es por casualidad y no lo dude que a más de tres les empiece a quitar el sueño.

Algo que mucho le habrá de ayudar de aquí en adelante es el haber resaltado siempre sus raíces veracruzanas. Y por si lo anterior fuera poco el artículo 11 de la Constitución Política Local la abriga, no habría mayor problema para aspirar a la gubernatura veracruzana.

No la pierda de vista.

Quizá la orden salida de Palacio Nacional es que la vayan placeando, que la den a conocer.

Lo cierto es que su llegada no es otra cosa que una muestra de la preocupación que tiene el dueño de “La Chingada”, por Veracruz.

LA LUPE RENUNCIA

Una vez divulgada la detención de su hijo conduciendo un vehículo oficial y, supuestamente, con droga, el Gobernador dio a conocer la salida de Guadalupe Argüelles Lozano, de la Secretaría del Trabajo.

Quien llega por lo mientras, como encargad de despacho de la dependencia, en su relevo es Diana Aróstegui, la misma que fue consejera jurídica de Derechos Ciudadanos, de la Oficina del Gobernador.

El hijo de la ex funcionaria estatal, Efrén Rogelio “N”, de 20 años, fue detenido en el norte del Estado, al circular un vehículo propiedad del Gobierno de Veracruz, en estado ebriedad y con una bolsa cuyo contenido es parecido al de la mariguana.

Por lo mientras, así de gandules como son los panistas, esta vez no pierden la oportunidad y el Grupo Legislativo de AN en la entidad exigió se audite la gestión de Guadalupe Argüelles, por los constantes señalamientos a su persona y que incluyen nepotismo y desvío de recursos partidistas.

Como si ellos tuvieran calidad moral, los diputados locales precisan que los constantes eventos negativos que acompañaron el desempeño de la ex funcionaria pública no fortalecen la confianza que debería tener un cargo público de esa responsabilidad, ya que recientemente se supo de la detención de su hijo en supuesta posesión de drogas y utilizando un vehículo oficial.

Por favor.