Vía e-mail: ¡El descaro! Rector de la UV busca reelección pese a denuncias por encubrimiento y abuso en Dirección Deportiva

* Durante su gestión se permitió la permanencia de Rosa Maribel Barradas señalada por abuso de poder, elitismo y encubrimiento de conductas indebidas
* Barradas Landa habría operado un presunto fraude de más de 70 millones, silenciado para no afectar la reelección de Aguilar Sánchez
Xalapa, Ver., 08 de junio del 2025.- “Por medio de la presente, en calidad de integrantes preocupados de la comunidad universitaria y resguardando el anonimato por razones de seguridad, nos permitimos hacer llegar esta denuncia en relación con hechos que consideramos de suma gravedad y que afectan directamente la integridad institucional y el bienestar de la Universidad Veracruzana.
Se ha tenido conocimiento de que el actual rector, Dr. Martín Gerardo Aguilar Sánchez, estaría buscando la reelección en el cargo, pese a que gran parte de la comunidad estudiantil, académica y administrativa no respalda esta intención. Esto resulta particularmente preocupante en virtud de ciertas decisiones tomadas durante su gestión, entre las que destaca el caso de la exdirectora de la Dirección de Actividades Deportivas, Rosa Maribel Barradas Landa.
La señora Barradas Landa permaneció en dicho cargo durante más de doce años, cuando el periodo establecido es de cuatro. Su permanencia prolongada coincidió con una gestión ampliamente señalada por maltrato laboral, abuso de poder, favoritismo, elitismo y encubrimiento de conductas indebidas, incluyendo casos graves de abuso y discriminación hacia alumnos.
En particular, hubo un caso muy sonado relacionado con el maestro de karate, Fernando Martínez Ocamura, contra quien se presentaron pruebas contundentes, como videos y fotografías que evidencian acoso sexual hacia varias de sus alumnas. A pesar de ello, la señora Barradas Landa protegió al entrenador; cuando los padres de una alumna acudieron a ella, los obligó a firmar un documento que eximía al entrenador de responsabilidad y, además, les retiró los uniformes deportivos, impidiéndoles representar a la universidad. A estos padres, personas humildes, se les negó toda atención, cerrándoles la puerta y despidiéndolos de manera irrespetuosa.
Durante los últimos cuatro años, bajo la administración del Dr. Aguilar Sánchez, se permitió su continuidad pese a los múltiples señalamientos. Recientemente fue separada del cargo sin mayor explicación y, en lugar de una investigación o rendición de cuentas, se le permitió jubilarse de manera discreta, lo cual genera dudas razonables sobre un posible encubrimiento de irregularidades. Existe la percepción entre el personal de que esta decisión buscó evitar un escándalo que pudiera afectar la imagen del rector en su aspiración a reelegirse, en lugar de atender las posibles faltas administrativas o financieras que se le atribuyen.
Cabe destacar que a la exdirectora Rosa Maribel Barradas Landa se le ha vinculado directamente con el escándalo que actualmente sacude al Consejo Nacional del Deporte de la Educación (CONDDE), dirigido por Manuel Merodio, quien ha sido señalado públicamente por opacidad en la rendición de cuentas. Se rumora que Rosa Maribel Barradas Landa habría sido una de las operadoras clave en un presunto fraude por más de 70 millones de pesos, lo cual ha sido silenciado deliberadamente para no afectar la imagen del rector Aguilar Sánchez en su proceso de reelección.
Aun habiendo dejado el cargo, la exdirectora continúa ejerciendo influencia sobre la dependencia mediante el personal que ella misma colocó, incluyendo a:
- Carlos Alfredo Torres Núñez
- Jerónimo Manuel Guzmán Saldaña
- Daniela Burgueño Teurel
- Claudia Hernández Vásquez (contadora)
- Juana Gael Mayora (secretaria)
Este equipo de trabajo ha sido señalado por sus malos tratos, bloqueos internos, favoritismos y falta de profesionalismo, lo cual mantiene a la Dirección de Actividades Deportivas en un estado de deterioro institucional preocupante.
Por todo lo anterior, exigimos de manera enérgica y urgente:
La intervención inmediata de las autoridades competentes para investigar los hechos señalados.
La revisión profunda de los actos administrativos y financieros realizados durante la gestión de la exdirectora, incluyendo el presunto fraude de más de 70 millones de pesos.
Una explicación pública y transparente por parte del rector respecto a las razones que motivaron la salida discreta de Rosa Barradas Landa, sin deslinde de responsabilidades.
La renovación total del equipo de trabajo que permanece al interior de la Dirección, para restablecer la confianza, la transparencia y la equidad laboral.
Una universidad pública debe regirse por los principios de legalidad, equidad y transparencia. En este sentido, resulta indispensable que se esclarezcan los hechos aquí denunciados y que no se encubra a quienes han dañado gravemente la institucionalidad universitaria”.