«No fue un accidente»: familiares de cadete xalapeña exigen justicia
- «¡Justicia para América!», claman sus padres durante el sepelio
- Cubierta con la bandera de México, la joven fue despedida entre aplausos y mariachi
- Familiares y compañeros aseguran que no fue un percance y piden que no haya impunidad
Martín Gómez
Xalapa, Ver., 20 de mayo de 2025.- Durante el sepelio de la cadete América Yamilet, su madre, la señora María del Rocío Hernández, exigió justicia por la muerte de su hija. Antes de que el ataúd descendiera, hizo el pronunciamiento.
También el padre, el señor Cosme Sánchez, alzó la voz junto a su esposa y gritó con fuerza el nombre de su hija: “¡América!, ¡Justicia! ¡Queremos justicia!”, dijo, mientras abrazaba a los familiares cercanos.
La señora María del Rocío pidió apoyo a los cadetes presentes: “Les pido, como pueblo mexicano que somos todos y que vieron el accidente, que esto no quede impune”, expresó conmovida.
“Ayúdenme, por favor, a que esto no se quede así, porque no fue un accidente. Ayúdenme, por favor”, reiteró minutos antes de que su hija fuera sepultada. Su reclamo fue respaldado por los asistentes.
El ataúd de América Yamilet estaba cubierto por una bandera de México. El incesante calor se sentía en el panteón Bosques del Recuerdo, rumbo al sur de la ciudad, donde cientos de personas —familiares, amistades y conocidos— se reunieron para darle el último adiós.
Aplausos y porras con el nombre de América resonaron en el cementerio, acompañadas por canciones como Amor Eterno y el Himno Nacional Mexicano.
El sepelio se llevó a cabo a las 4:30 de la tarde, acompañado por un mariachi que interpretó varias melodías.
Las lágrimas corrieron entre quienes asistieron a despedir a la joven cadete, fallecida a causa del choque del Buque Escuela Cuauhtémoc contra un puente de Brooklyn, Nueva York, la noche del sábado 17 de mayo.
Con flores en mano, compañeros, excompañeros, familiares y amistades lloraron la partida de la joven, quien en junio habría cumplido 21 años.
América quedó en el recuerdo de sus seres queridos y de muchos mexicanos. La tarde del martes 20 de mayo, todos exigieron justicia para que su caso no quede en la impunidad.
