El que se presentó puntual ayer al cierre de filas con la presidenta Claudia Sheinbaum en el Museo Nacional de Antropología fue Cuauhtémoc Blanco, pero se quedó solo porque nadie se le quería acercar. Luego de recibir la protección de Morena, PRI y Verde en el Congreso frente a la acusación por presunto intento de violación, el diputado Blanco anduvo como dedo, pero como los reporteros que cubrían el acto sí querían hacerle preguntas, salió por la puerta del sótano para tratar de evitarlos. Incluso, en su huida se le acercó al secretario de Economía, Marcelo Ebrard, quien lo saludó con desgano y siguió caminando. Así que don Cuauhtémoc huía de la prensa y sus compañeros de partido huían de él. Al final, se retiró solo, con su fuero. Deja entrever «Bajo Reserva» de El Universal
Cuauhtémoc, con fuero, pero sin amigos
