Manuela V. Carmona
Orizaba, Ver., 8 de marzo de 2025.- Tras los deterioros registrados durante la marcha conmemorativa del Día Internacional de la Mujer, en los que resultaron dañados los cristales del histórico Palacio de Hierro de Orizaba, un grupo de mujeres policías fue desplegado para resguardar el edificio, imagen que contrastó con quienes se manifestaban para exigir un alto a la violencia.
Durante la manifestación, que congregó a miles de mujeres para exigir el fin de la violencia de género y la opresión sistémica, un grupo de personas realizó destrozos en el histórico inmueble, lo que derivó en la intervención de las fuerzas de seguridad, sin embargo, la presencia de mujeres policías como figura de contención ante posibles nuevos daños ha sido interpretada como un símbolo de las tensiones que existen dentro del propio movimiento feminista.
Esta situación generó un intenso debate en redes sociales y entre activistas, pues mientras algunas personas critican la instrumentalización de las mujeres policías para frenar las protestas, otras destacan la complejidad de su papel, al ser parte de un sistema que, en ocasiones, también las victimiza.
