• Familiar de la joven madre solicita investigación urgente sobre el caso y de la directora del nosocomio

 

  • Señala que no había médico que la atendiera para su parto y ya llevaba la fuente rota

 

Naranjos, Ver., 27 de febrero de 2025.– «Buenas noches, me dirijo a ustedes amable y respetuosamente con la finalidad de denunciar un caso de negligencia médica contra mi sobrina Melissa Santiago Pérez, de 20 años de edad, madre soltera, originaria de Tantima, Veracruz, exponiendo el siguiente caso.

 

Melissa llevaba su control en el centro de salud de Tantima, de donde fue canalizada al hospital de la comunidad IMSS-Bienestar de Naranjos.

 

El día 13 de enero, era su primera cita para valoración ginecológica, fue atendida por el doctor Rodrigo Noé Hernández Castelán en el área maternal sin ningún problema.

 

El día 19 de febrero regresó al hospital a urgencias por problemas de presión alta. El médico que la atendió dijo que se quedaba internada, que ya tenía que operarla, ya que cumplía con las semanas de gestación y aparte por los problemas de salud que ella venía presentando. Otro médico del hospital dijo que no era el momento aún para la cirugía y la regresaron a casa.

 

El día 23 de febrero se sintió mal, la checó un médico particular y le envió al hospital con un escrito para que fuera atendida y se le realizara la cirugía, pero de vuelta la regresaron a casa sin medicamento alguno.

 

El día 26 de febrero tenía su cita por la mañana para su chequeo y ya no pudo asistir porque a las tres de la mañana de ese día se le rompió la fuente.

 

Tuvo que ser trasladada de Tantima al hospital de Naranjos, que está a media hora de distancia. La recibieron y la canalizaron, pero no había médico que la atendiera para su parto.

 

La tuvieron unas horas canalizada; ellos ya sabían cómo era la situación de Melissa, los problemas que presentaba y que el bebé venía sentado.

 

Después de tenerla unas horas, le hablaron a la directora del hospital y su respuesta fue que iba a buscar un cirujano, pero para más tarde, y que si no la enviaran a Poza Rica, que está a tres horas de distancia, y con una fuente rota era imposible, que si no se la llevaran a una clínica particular.

 

El mismo hospital la sacó de la clínica médica en una ambulancia y la enviaron en muy malas condiciones, ya que el bebé ya llevaba un piecito fuera y parte del cordón umbilical, y por lo mismo, sin signos vitales.

 

El bebé ya había muerto. Pido que este caso sea investigado urgentemente y se le cubran todos los gastos médicos ocasionados por la culpa del hospital.

 

Quiero hacer de su conocimiento que no es el primer caso ocurrido, por comentarios de pacientes y familiares y personas del hospital y de la clínica también. Pido se investigue a la directora de dicha unidad médica, Noemí Ramírez Juárez, ya que creo no está capacitada para dirigirlo.

 

Pido justicia para Melissa Santiago Pérez y su hijo. Gracias de antemano».