Desde hace varios meses el fiscal Uriel Carmona se tambaleaba del puesto del que ayer finalmente fue cesado por el Congreso de Morelos. No puede verse entonces su salida como una sorpresa y menos, nos hacen ver, si se toma en cuenta además un antecedente de relevancia: el caso de Ariadna Fernanda. Y es que este último desató un choque y fuertes cuestionamientos, luego de que la joven fuera hallada sin vida en la entidad con huellas de golpes, luego de ser su cuerpo trasladado desde la Ciudad de México hacia ese lugar. La fiscalía de Carmona sostenía que la joven había fallecido por broncoaspiración y por lo tanto rechazaba que fuera un feminicidio, tesis que era defendida por la fiscalía capitalina, entonces a cargo de Ernestina Godoy, que había realizado sus propios peritajes y revisado incluso videos en donde los principales sospechosos de agredirla sacan su cuerpo cargando de un departamento. El asunto creció de tal manera que Carmona incluso estuvo en prisión acusado de obstaculizar la justicia. Señala «Rozones de La Razón».
Antecedente relevante del cese del fiscal
