* Existe un enorme rezago en las diferentes áreas; no hay cuidado en la integración de las carpetas de investigación ni responsables que les den seguimiento», señaló Hernández Matías

 

Irineo Pérez Melo

Xalapa, Ver., 05 de diciembre del 2024.- La fiscal general del Estado, Verónica Hernández Giadáns, ha dejado mucho que desear al no rodearse de subalternos con experiencia para abatir el rezago existente en las diferentes áreas de este organismo autónomo. Ni siquiera en asuntos relevantes se ha tenido el cuidado ni existe un área o responsable que dé seguimiento adecuado a las carpetas de investigación.

Esto fue evidenciado por Rafael Hernández Matías, representante del Frente Nacional Jurídico en Defensa de la Constitución, quien señaló que el rezago persiste y que no hay una supervisión escrupulosa de las carpetas de investigación, sin importar el tipo de delito. «Se les da el mismo trato a todas cuando se integran», afirmó.

En este sentido, consideró de suma importancia establecer prioridades en la atención de las carpetas de investigación, ya que no es lo mismo tratar un caso de robo que uno de desaparición o homicidio.

En entrevista, el litigante subrayó que, aunque ningún delito debe ser menospreciado, es esencial priorizar algunos casos. «A todos se les ha dado el mismo trato, como si fueran solamente un número, ya sean desaparecidos o casos de violencia contra las mujeres. Esto demuestra que no hay personal calificado para atender estas materias», indicó.

Hernández Matías insistió en la necesidad de que la FGE cuente con personal capacitado y experimentado. Según él, en las diferentes organizaciones de abogados existen profesionales idóneos, pero han sido relegados por razones políticas.

«Nunca se invitó a los colegios, barras y asociaciones de abogados a participar en el área consultiva, como sucedía antes, cuando la Procuraduría General de Justicia contaba con un Consejo Consultivo que funcionaba con la participación de cámaras empresariales y diversas organizaciones de abogados. Ese consejo operaba de manera similar al Consejo de la Judicatura y fue efectivo», recordó.

Sin embargo, lamentó que actualmente se ha eliminado toda participación ciudadana, ya que se busca monopolizar y centralizar el poder, algo que consideró muy negativo.

Respecto a la posible remoción de la titular de la FGE, Hernández Matías opinó que las señales enviadas por la gobernadora Rocío Nahle García son claras y sugieren que Hernández Giadáns debería renunciar.

«No hay necesidad de llegar a un conflicto. Como dijo un exgobernador: ‘todo puede ser mientras no sea traumático’. Por lo tanto, ella debería renunciar. Primero, debería hacer un ‘mea culpa’ y, si eso no es suficiente, respetar las señales enviadas por la titular del Ejecutivo. Ya se juntó el hambre con las ganas de comer; debe entregar su renuncia porque eso es lo correcto», expresó.

Finalmente, consideró que no debería haber fiscales autónomos y que se debería regresar al modelo en el cual cada gobernador nombraba a su fiscal con la aprobación del Congreso. Según Hernández Matías, este mecanismo generaba un compromiso democrático entre el fiscal y el gobernador en turno, asegurando resultados tanto para el pueblo como para la administración.

«Con el modelo actual, no se están entregando resultados. Tal vez el fiscal no debería ser removido con la misma libertad que un secretario, pero sí debería ser nombrado por el gobernador en turno, ya que actualmente ni es autónomo ni independiente», concluyó.