En Nuevo León, los diputados de Morena demostraron que eso de “primero los pobres” es sólo un eslogan para las pancartas. Al rechazar la propuesta de actualizar los valores catastrales en Escobedo y García, dejaron claro que la lectura no es su fuerte ni los principios de la 4T su prioridad. La idea era sencilla, que los ricos industriales paguen más, no el pueblo trabajador, pero terminaron con cables mal conectados. Los alcaldes Andrés Mijes y Manuel Guerra los llamaron traidores, pero en realidad tal vez sólo son ignorantes. Quizá Luisa Alcalde, líder de Morena, debería tomar un vuelo al norte para darles clases sobre la “transformación”. | Se detalla en “Frentes Políticos” de Excelsior.