Y en contraste, el Gobierno de Sinaloa, encabezado por Rubén Rocha, dejó en los organizadores de la Feria Ganadera la decisión de mantener o cancelar el evento, ante las amenazas del crimen organizado. Rocha simplemente aventó la pelota con el argumento de que es un evento organizado por privados, como si las autoridades no tuvieran la responsabilidad de decidir qué actos masivos se pueden realizar y cuáles no, en función de la seguridad de la población. Hay quienes piensan que, al salirse por la tangente, Rocha claudica a sus funciones legales e institucionales, para dejar en manos de “privados” una decisión en la que está de por medio la integridad física de miles de personas. Lo deseable es que, si se realiza el también llamado Palenque Culiacán 2024, no haya consecuencias negativas. Pero no se entiende el porqué de ese empecinamiento de la autoridad en el evento, con todos los riesgos que conlleva. Como sea, pendientes. | Se lee en “Rozones” de La Razón.