Justo lo que le faltaba al PRI para acabar con el partido

Nos cuentan que la aplanadora que le pasó por encima el domingo pasado al PRI, comenzó a mover las aguas internas, tanto que los propios priistas ven señales de que quienes se perfilaban como seguros sucesores de Alejandro Moreno en la dirigencia nacional, el coahuilense Rubén Moreira, o su esposa Carolina Viggiano, tendrán que enfrentar la maniobra del propio Alito para impulsar a su paisano campechano Pablo Angulo, actual secretario técnico del Consejo Político Nacional. Nos hacen ver que don Pablo y don Alito son amigos desde la juventud y que a nadie sorprendería que quisieran hacerle la mala jugada a don Rubén. En los pasillos del tricolor, bastante desolados últimamente, se asegura que se trataría de un intento por tener un “Maximato” en el partido. Justo lo que le faltaba al PRI para acabar con el partido. | Se puede leer en “Bajo Reserva” de El Universal.