Invertir en Nayarit se ha convertido en una apuesta de alto riesgo. Con el gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero al mando, la entidad es una cueva de ladrones. ¿Invertir o no invertir? El gobierno pretende expropiar un terreno a la empresa japonesa Sumitomo, lo que seguramente asustará al capital. No es sólo un “robo en despoblado”, es el miedo a invertir en un estado donde las reglas pueden cambiar a petición de Navarro Quintero. El gobernador tiene la tarea de limpiar la imagen de Nayarit ante los ojos de los posibles inversores, pero es obvio que le falta capacidad. Nayarit sigue a la baja. | Se detalla en “Frentes Políticos” de Excelsior.