• Fue una coincidencia de la vida porque yo no pensaba en ser bombero, yo quería ser técnica en Urgencias Médicas, relata

 

  • Cuando ingresó a la corporación no había féminas, por lo que se enfrentó tanto a comentarios positivos como negativos

 

  • Además, es técnica en Urgencias Médicas en la Cruz Roja, labora en Protección Civil Municipal y es docente en la Academia de Bomberos

Susana García Parra

Xalapa, Ver., 22 de agosto de 2023.- Desde pequeña, Magaly soñaba con ingresar a laborar a una corporación de emergencia para poder ayudar a quienes sufren de alguna situación de riesgo. Gracias a su esfuerzo lo logró y hoy está de fiesta.

Y es que, desde hace 17 años, es voluntaria en el Cuerpo de Bomberos de Xalapa, por lo que este martes celebra su día.

Magaly Domínguez Acosta es originaria de Acayucan y estudió la licenciatura en Educación. Desde la secundaria tenía la inquietud de ser paramédico, pero fue hasta 2006, ya viviendo en la capital, que logró ingresar con los Vulcanos.

“Fue una coincidencia de la vida porque yo no pensaba en ser bombero, yo quería ser técnica en Urgencias Médicas pero en aquel entonces no me aceptaron en la Cruz Roja. Un día pasaba por la Estación y vi a los bomberos, pedí informes y me dijeron que no había mujeres bomberos pero que podía venir de voluntaria y así fue que llegué”, expresó.

Desde su ingreso causó toda clase de sentimientos entre sus compañeros, ya que era una labor que, en su mayoría, era realizada por varones. Algunos la aceptaron, pero también recibió comentarios negativos.

“Viví la parte de que decían que era mujer, que mejor me dedicara a la cocina, cosas así en las que no era tan bien aceptada en esta labor. Mucho tiempo yo venía a hacer otras actividades, pero no me permitían salir a hacer servicios como tal, pero por fin luego de batallar logré salir”.

Con orgullo, recuerda que la primera vez que salió a un llamado fue a un incendio de una vivienda en la zona de San Bruno; en aquel entonces, el Segundo Comandante José Luis Pérez le dio la oportunidad.

“Él quería ver las ganas que yo tenía de estar y ahí me quedé con él. Lo primero que pensé fue ¿qué hago aquí?, pero ver trabajar a mis compañeros supe que quería ser parte del equipo”, expresa.

Luego la mandaron a apoyar en fugas, captura de animales, enjambres y poco a poco aprendió más sobre la labor, “aprendimos en el camino porque no había una Academia de Bomberos como ahora”.

Desde entonces, han pasado 17 años en los que ha tenía un sinfín de aventuras con sus compañeros, a quienes considera su segunda familia.

“Algunas veces pasamos más tiempo aquí que en casa porque hay guardias de 24 horas y pues se va creando el vínculo de confianza y hermandad”, señala.

Su madre y su hijo de 14 años, son su mayor motivación para salir adelante; ambos la apoyan y admiran en su labor en el que afortunadamente jamás ha sufrido accidentes.

“Nuestro trabajo implica muchísimo riesgo y te puedo decir que en la actualidad ya no nos vemos como héroes, porque dicen que de héroes están llenos los panteones, nosotros nos capacitamos y buscamos laborar con seguridad y minimizando cualquier posibilidad de riesgo”.

Este martes, junto con sus compañeros porta con orgullo el uniforme y celebran su día, en el que se les reconoce por ser una corporación que siempre brinda una mano a quien lo necesita.

“Estoy muy agradecida con la vida, me veo con mis compañeros a la par y me aceptan como una igual. Es de las mejores experiencia de vida que he tenido”.

Actualmente, además de ser Técnica en Urgencias Médicas en la Cruz Roja y laborar en Protección Civil Municipal, es docente en la Academia de Bomberos, es decir, es quien forma a los nuevos elementos de Veracruz.+