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Miles de manifestantes se congregaron en las calles de Nueva York este viernes alzando la voz al unísono, exigiendo «Palestina libre», en un contundente llamado a denunciar los bombardeos israelíes en la Franja de Gaza como represalia al sangriento ataque del grupo islamista palestino Hamás durante el fin de semana.

Los manifestantes, una diversa multitud de todas las edades y orígenes, llenaron varias manzanas de esta ciudad, que atrae a personas de diferentes religiones y nacionalidades de todo el mundo. En su mayoría jóvenes, los manifestantes acusaron a Israel de llevar a cabo un «genocidio» y exigieron que Estados Unidos retire su apoyo a su aliado en Oriente Medio.

La escalada de violencia comenzó con un ataque de combatientes de Hamás procedentes de Gaza, que irrumpieron en Israel el pasado sábado, cobrando la vida de más de mil 300 personas, la mayoría de ellas civiles. En respuesta, Israel lanzó un bombardeo con misiles sobre el densamente poblado enclave palestino, que ha resultado en la muerte de al menos mil 900 gazatíes, en su mayoría civiles, incluyendo más de 600 niños.

Liz Zacharia, profesora asistente y participante en la marcha, expresó su preocupación:

 

«Esto tiene que acabar. El proyecto de colonos de Israel tiene que terminar ya», agregó Zacharia, cuyo padre era de Jerusalén, y señaló que esto alimenta un creciente «ciclo de violencia» y «opresión de los palestinos».

Los manifestantes corearon en repetidas ocasiones: «Desde el río hasta el mar, Palestina será libre«, un lema que ha generado controversia, ya que algunas organizaciones judías lo consideran antisemita y una llamada a la destrucción de Israel, mientras que sus partidarios argumentan que aboga por la igualdad entre palestinos e israelíes.

Además de Nueva York, alrededor de 200 manifestantes propalestinos se congregaron en Miami, en el sur de Estados Unidos. La protesta en Nueva York estuvo fuertemente vigilada por las fuerzas de seguridad, quienes mantuvieron la distancia con un pequeño grupo de manifestantes proisraelíes que se encontraban al otro lado de la calle.

Anas Amireh, un empresario de 51 años e hijo de inmigrantes palestinos, condenó la respuesta a las matanzas de inocentes en Israel como «otro genocidio… en la Franja de Gaza», y lo calificó como una «guerra criminal».

Es importante destacar que Nueva York, que alberga la mayor población judía fuera de Israel, ha sido testigo de una serie de manifestaciones en apoyo de la causa palestina a los largo de la semana, así como de vigilias y manifestaciones en solidaridad con las víctimas israelíes del ataque de Hamás. La tensión en la región continúa generando preocupación y movilización en diferentes partes del mundo.