Nos recomiendan poner la lupa sobre un fenómeno que se ha presentado en los últimos días en Sinaloa: el “castigo” mediante el clásico tableado por parte del crimen organizado. Ayer un joven murió en Culiacán luego de recibir una golpiza con una tabla en glúteos, espalda y cabeza. No es un hecho aislado, pues apenas el jueves de la semana pasada dos jóvenes fueron hospitalizados en el IMSS de Angostura por el mismo motivo y uno más perdió la vida en el mismo nosocomio el pasado 23 de mayo, tras ser martirizado con una tabla. Cuatro casos en menos de un mes, con dos muertos. La repetición, nos alertan, conlleva el riesgo de que esta práctica tan deleznable se normalice, así que más vale una alerta a tiempo. ¿Y el gobernador Rubén Rocha? Bueno, él está muy ocupado ideando cómo hará para tomar las grandes empresas productoras de grano. ¡Uf!   |  Se lee en “Rozones” de La Razón.