El campechano vino a darles atole con el dedo a los priistas locales. 

Fiel a su estilo y su costumbre “el amigo” de Layda Sansores, hizo como quiso a los locales, les dijo de todo, les endulzó el oído y los dejo entusiasmados. Como quinceañeras.  

El dirigente estatal, mas no líder, el tal Marlon Ramírez, se lució, como dama de compañía es toda una autenticidad, todo un ejemplo, porque como dirigente tricolor no es otra cosa más que un doméstico del número dos en el organigrama estatal. 

Lo que no les dijo, Moreno Cárdenas, a los priistas veracruzanos es que está a las órdenes del tabasqueño, del López de palacio nacional. Lo que omitió decir es que él ya salvó su pellejo, ya no habrá de pisar la cárcel o cuando menos continuar siendo perseguido y exhibido por su paisana. 

A los priistas veracruzanos les hizo creer que para el próximo año podrían ganar, les digo que habrán de buscar que un priista encabeza la posible coalición, lo que no les dijo quién es ese priista, donde está, ya que no se logra ver por ningún lado, excepto que se haya referido al alcalde orizabeño, Juan Manuel Diez Franco. 

Moreno Cárdenas solo vino a pasear a Veracruz, a lucirse, haciéndose acompañar de su chicuela, de esa veracruzana de la cual se escuchan historias hormonales bastante escabrosas, la misma que si no le cumplen sus caprichitos político- electorales en un partido se pasa a otro sin mayor bochorno, sin mayor empacho. 

Lo que no terminan de entender los priistas es que los escándalos mediáticos, las raterías de sus ex gobernadores, el desvío de recursos públicos, las ambiciones personales y los intereses electorales acabaron al tricolor. 

Por más que han hechos esfuerzos por rescatarlo, por más que han le han puesto bríos para neutralizar la gran crisis en que han caído, nada les ha salido bien, todos estos atrevimientos han sido quebradizos y, lo peor, nada creíbles para la militancia.  

En estos momentos le realidad del tricolor es que transita rumbo a la decadencia, a la extinción. 

Los dos bastiones electorales que le quedan al tricolor, el Estado de México y Coahuila, ya no tardan en perderlos, solo es cuestión de unos meses para ceder sus reservas de votantes. 

Para nadie es su secreto que estas dos plazas sólo le representan escenarios desfavorables, ya que levantarse con la victoria solo estaría prolongando su agonía y una derrota no sería otra cosa que su desaparición. 

Así de sencillo. 

Y dónde queda Veracruz, ese bastión electoral, esa gran reserva de votantes que tanto presumió el tricolor y del cual muchos que medraron con las siglas, se sentían orgullosos. 

Ahora son los mismos que se avergüenzan del instituto político que les dio fama y poder, que le mato el hambre y lo saco de la miseria. 

EL AYUNTAMIENTO DE XALAPA IMPULSA LA PARTICIPACION CIUDADANA

La actual comuna capitalina no descuida detalle alguno. 

La intervención vecinal es toda una realidad. 

Un ejemplo de lo anterior es cuando se concluye una obra ya que la labor de los Comités de Contraloría Social sigue siendo encauzada al mantenimiento, cuidado y limpieza de cada beneficio social, de cada acción. 

Durante 2022 y lo que va del 2023, la participación ciudadana ha sido primordial, especialmente en la vigilancia de la ejecución de la obra pública, pero también en el cuidado del mobiliario urbano y de parques y jardines. 

Ha sido de vital importancia el que las y los jefes de Manzana, así como los integrantes de los Patronatos Vecinales y la ciudadanía en general, se involucren en estas acciones, ya que para toda la ciudadanía el cuidado de la infraestructura urbana es prioridad. 

Algo importante de resaltar es la denuncia ciudadana, esa herramienta que permite a las autoridades municipales enterarse de alguna falla en los servicios, por alguna fuga o vialidad en mal estado, es muy necesaria para que la administración trabaje mejor. 

Bien por la actual comuna que encabeza Ricardo Ahued.