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Han pasado casi tres décadas desde que Tito Fuentes, Paco Ayala, Micky Huidobro y Randy Ebright estallaron la bomba Molotov —como banda— en la escena del rock musical cuando con su primer álbum, Dónde jugarán las niñas, abrieron aún más el camino a la crítica social y política a través de la música.

Su esencia es la misma: son irreverentes, no se callan lo que piensan, ponen el dedo en la llaga de lo que sucede en el país y así ha sido siempre, por eso su disco Solo Delira —el cual se lanzará completo el próximo 30 de abril— contiene esa furia con la que aparecieron… y la experiencia de 27 años de existencia.

 

Hay de todo, creo que ya sin querer escogemos unas canciones que tienen más contenido crítico, otras son más desmadrosas, otras son más íntimas y personales y hacemos como un balance y nuestra función no sólo ha sido entretener como artista y banda, sino también acompañados por muchas mentes y público que ha estado con nosotros, provocar y cuestionar lo que pasa constantemente, no importa quién esté en el poder ni el color, es cuestionar cómo estamos como mexicanos y tratar que sucedan las cosas”, compartió Ayala en entrevista con Excélsior.

Y es con ese álbum recién salido del estudio que el 12 de mayo se enfrentarán a uno de los retos más grandes y más “chidos” de su carrera: presentarse por primera vez como banda solitaria en el Foro Sol de la Ciudad de México, donde cerrarán la gira Estalla Molotov, con la cual llevan viajando por México, Chile, España, Perú y Argentina, entre otros países, poco más de un año.

Hasta si fuera gratis creo que sí es un desmadre llenarlo, ¿no? Es uno de los lugares más emblemáticos del país para tocar y han desfilado grandes bandas y nosotros como músicos, obviamente nos llama mucho la atención lograrlo una vez, hay quienes lo hacen tres, cuatro veces, pero para nosotros es como empezar un nuevo proceso, darle un cierre a lo que hemos venido haciendo durante ya un tiempo y ver la respuesta de la gente.

Nos sirve de mucho medirle el agua a los camotes de ver lo que va a pasar en un futuro con este material, con lo que viene en las giras, entonces, es un buen termómetro para eso. Ya vamos para el cuarto sencillo, así que para cuando salga el disco ya estaremos en un quinto, todo depende de lo que quieres tocar y de lo que quieres presentar a la gente, pero también de la magia que pase ese día, por ahí vemos que tocamos más rolas nuevas, obviamente estaría increíble poderle mostrar al público el disco completo ese día, pero la lista tiene que abarcar un poco la historia de la banda”, dijo Huidobro.

 

Para esta presentación, en la que habrá sorpresas “que si decimos ya no son sorpresas”, la banda no teme a las nuevas generaciones que podrían incomodarse con sus letras o con sus acciones, que de alguna manera los nuevos artistas han replicado y han sido aplaudidas. Rastamandita, una de las canciones emblemáticas de Molotov, considerada con una alta carga de misoginia, no sólo en la letra, sino en el hecho de que cada vez que se toca en vivo, la banda invita a las chicas a subir al escenario a bailarla.

Lo acaba de hacer Bad Bunny o no se quién de ellos y a la gente le encantó… nosotros hicimos eso hace más de 20 años, en el ‘98, entonces, creo que no aporta nada, para nosotros ya es normal eso y realmente no aporta y si la gente quiere escucharla la tocamos, pero ya forma parte del repertorio antiguo.

Nos estamos enfocando más en tocar lo nuevo, a conocer la nueva cara de Molotov, pero tiene de lo antiguo y al mismo tiempo es actual y entre más tiempo pasa más… hay personas que hasta ya se murieron y que nosotros mencionamos en las rolas; sí cambia el mundo muy rápido. Es otro mundo, pero en algún momento regresas al punto de inicio, es cíclico y creo que ahorita estamos en ese momento, regresamos a un momento que es muy parecido a cuando salimos”, explica Micky.

Molotov tiene la vista puesta en el futuro, un futuro que podría llevarlos a crear su propio festival, “el MoloFest”, para finales de este año o principios del siguiente; a grabar un nuevo disco —en los Abby Road Studios de Londres— que lanzarían en 2024 y, por qué no, regresar a sus orígenes y embarcarse en una gira de bares, como en los años de inicio.

Siempre nos ha gustado tocar en antros a un metro, metro y medio de la gente, bañados en sudor, en chela, en lo que sea, y de pronto no podemos perder eso porque es la raíz, de ahí arrancamos y regresar, literal, a la tierra y decir así empezamos y aquí seguimos. Hicimos algunos shows sorpresa en el Foro Imperial hace unos años y la pasamos rebién, estaría buenísimo encontrar un lugar y hacer algo así”, señaló Paco.

Todos tenemos un proyecto aparte y nos ha tocado salir a tocarlo en vivo, etapas de DJ, todos como que extrañamos mucho esa parte íntima de tocarle a la gente, pero ya no existen tanto los lugares rocanroleros, hay algunos hoyos funky o lugares chiquitos donde se toca rock que están bien padres y sí estaría bueno ir a hacer un pop up”, agregó Micky.