Antes de concluir su primera visita oficial de trabajo a Cuba y su primera gira internacional a Centroamérica y el Caribe, el presidente Andrés Manuel López Obrador y su comitiva disfrutaron de una comida en honor del mandatario mexicano que ofreció su homólogo cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez. Variadas fueron las viandas del menú, como aperitivo ron y al final los infaltables puros que han hecho famosa a la Isla. Nos comentan que el ánimo de la reunión no pudo ser mejor y que al presidente López Obrador se le observó muy contento, pues además de degustar la cocina cubana el mandatario dejó abierta la posibilidad de que México compre a la isla medicamentos para el sector salud. Publica «Bajo Reserva» de El Universal