Muchos reclamos y exigencias del gremio periodístico se encuentran actualmente sobre el gobierno de Sinaloa, que encabeza Rubén Rocha Moya, quien ayer, nos comentan, buscó rápidamente expresar su “consternación” por el asesinato del periodista Luis Enrique Ramírez. Hasta anoche, sin embargo, era más grande la ola de indignación que su compromiso de “esclarecer el crimen”. Un desplegado del periódico El Debate, para el que Ramírez escribía, la reflejaba claramente: “No queremos de las autoridades las frases de siempre, las excusas de siempre”. Ayer llovían las expresiones de solidaridad con la familia de Ramírez, con El Debate y con el gremio periodístico de Sinaloa y del país. Sobre el accionar de la autoridad hay signos de interrogación. | Se lee en “Rozones” de La Razón.
