* Se contactó a los familiares de las 26 personas que fallecieron tras el desplome del tren, quienes narraron cómo ha sido su vida tras la tragedia. Te contamos sus historias

 

MILENIO

 

La noche del 3 de mayo de 2021, la Ciudad de México vivió una de las tragedias más grandes de los últimos años: un tren del Metro cayó tras desplomarse parte del tramo elevado de la Línea 12; el saldo: 26 muertos.

A un año del accidente, MILENIO contactó a los familiares de las víctimas, quienes contaron el dolor de enfrentan a diario al vacío que dejó la muerte de sus padres, parejas, hermanas o hijos. Te contamos sus historias.

​»Son momentos difíciles para la familia»: mamá de Brandon Giovanny

La vida de la familia Hernández Tapia cambió el 3 de mayo de 2021; cuando Brandon Giovanny, de 12 años, viajaba en el vagón de la Línea 12 del Metro que cayó en la estación Olivos.

A un año de la muerte del menor, Marisol Mayte Tapia de Jesús, mamá de Brandon Giovanny, no quiere hablar de lo sucedido; “son momentos difíciles para la familia”, aseguró a MILENIO.

La noche del accidente, el menor regresaba de comprar un regalo para el Día de las Madres; sin embargo, la celebración ya no llegó para la familia Hernández Tapia, quien ahora exige justicia.

“El abogado (Teófilo Benítez) está atendiendo a todos los medios y dará una conferencia”, expresó.

Brandon Giovanny Hernández Tapia era el mayor de tres hermanos: Bryan y Alan; cursaba el segundo año de secundaria y le gustaba fútbol, pero sobre todo bailar, dijeron hace un año sus familiares.

Familia de Mario Alberto «sigue viviendo su duelo»

Los padres de Mario Alberto Bautista Sánchez, un joven de 25 años,  no respondieron a la solicitud para hablar sobre lo sucedido; sin embargo, uno de sus familiares, quien pidió el anonimato, explicó que aún «siguen viviendo su duelo”.

La ausencia de Jesús «dejó un vacío enorme»

Tras terminar su jornada laboral, Jesús Baños García se dirigía a casa de sus padres, quienes lo esperaban para cenar, pero el colapso de la Línea 12 del Metro impidió que el joven de 27 años llegara a Mixquic.

A un año del derrumbe, su hermana Karen cuenta que los padres de ‘Cho’, como le decían sus familiares y amigos, y su hija han recibido apoyos del gobierno de la Ciudad de México.

A los padres de Jesús se les ayudó para construir su casa, uno de los propósitos del joven, quien soñaba con ganarse la Lotería para comprarle una vivienda a su familia.

«Les ayudaron a construir su casa y de a poco les han ayudado a ponerla bonita», afirmó.

Aunque el apoyo no sólo ha sido económico, pues también se les ha dado atención psicológica y médica.

«Desde el accidente hasta la fecha han estado pendientes de mis padres», destacó.

Mientras que la hija de Jesús ha tenido acceso a terapias psicológicas y educación; «ella ahora está en una buena escuela y en ese aspecto sí han cumplido».

El 4 de mayo, la familia de Jesús hará una misa para recordar su aniversario luctuoso, y el sábado 7 realizarán otra en Mixquic para los amigos de ‘Cho’.

Karen narró que la ausencia de Jesús ha sido un proceso «realmente duro», ya que su hermano «dejó un vacío enorme» para todos aquellos quienes lo conocían.

«Es algo con lo que ha sido difícil vivir, es el primer año y no me quiero ni imaginar cómo serán los que vienen, lo extraños mucho», dijo.

Karen, sus padres, su familia y sus amigos recuerdan a Jesús día a día con oraciones, con su música favorita y con visitas en el panteón.

“Este accidente nos arruinó la vida”

Durante nueve meses, Celia Morales pasó gran parte de su tiempo dormida pues sólo en sueños podía ver de nuevo a Ismael Salazar Juárez, su esposo durante 25 años y una de las víctimas del desplome de la Línea 12 del Metro en la Ciudad de México.

“Este accidente nos arruinó la vida (…) Son cosas que no hemos podido superar y lo recordamos con mucha tristeza”, dijo en entrevista con MILENIO.

Dos semanas antes del desplome en la llamada Línea Dorada, el supervisor de Ismael decidió cambiarlo de farmacia porque necesitaba a una persona trabajadora y de confianza en la nueva sucursal, una que lo obligaba a tomar el Metro.

La noche del 3 de mayo de 2021, Celia y sus hijas de 20, 17 y 14 años esperaban a Ismael en la sala de su casa para cenar. Las tortas de jamón que se le habían antojado al también aficionado al futbol y seguidor del Cruz Azul estaban listas, pero él no llegaba.

“Sonó el teléfono y era mi cuñado; me preguntó por Ismael y le dije que no había llegado. Me pidió que prendiera la tele porque se cayó el Metro (…) Cuando prendí las noticias, mi hija se puso muy mal y se salió corriendo a buscarlo”, platicó.

Esa noche no tuvieron noticia de Ismael, pero Celia presentía que algo estaba mal, pero fue hasta el día siguiente que decidieron buscarlo en el Semefo, y encontraron su nombre en la lista de las víctimas.

“En el fondo sabía que ya no estaba aquí, algo me decía porque días antes nos despedimos. Hablamos de toda nuestra juventud y de todo lo que habíamos pasado”, platicó.

A un año de la muerte de Ismael, su familia lo recuerda todos los días, muestra de ellos son las fotos del hombre de 49 años que decoran la sala de su casa; y aunque siguen llorando su perdida, no olvidan lo feliz que era.

“A veces una llora y la otra está tranquila; a veces yo lloro y ellas están tranquilas; así como que vamos llorando por los rincones (…) Yo lo recuerdo a él siempre muy alegre, o sea, él era muy de sonrisas”, mencionó Celia entre lágrimas.

Hace cuatro meses Celia empezó a salir de casa y a trabajar para el gobierno capitalino, quien le ofreció empleo como parte de los apoyos a los familiares de las víctimas. La mujer reconoce “que si le echo ganas es por las muchachas”.

“Si me pudiera escuchar, le diría que lo amo mucho y que estoy cuidando a sus hijas; que esté tranquilo y que el día que yo parta con el Señor, quisiera volver a verlo, encontrarlo y poder ver que está bien”, dijo.

Tras muerte de Nancy, estas fechas son «días difíciles»

Nancy Lezama, una joven de 23 años, fue una de las víctimas del desplome de la Línea 12 del Metro. Aquel 3 de mayo iba de regreso a casa con su hermana Tania, de 15, luego de haber visitado Parque Las Antenas, donde también estuvo con su novio.

Nancy murió tras el colapso del Metro y aunque Tania sobrevivió, sufrió lesiones que pusieron en riesgo su capacidad de caminar y, hasta el último reporte, había sido sometida al menos a tres cirugías.

Édgar, hermano de ambas víctimas, reconoció que estas fechas representan “días difíciles” para la familia, por lo que no fue posible brindar una actualización de los casos.

«No es un adiós, es un hasta pronto»: hijo de Alejandro Mendoza

Alejandro Mendoza Vega tenía 53 año y era un contador egresado  la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), que trabajaba en la Fiscalía General de la República (FGR).

Poco antes del accidente, avisó a uno de sus dos hijos que ya iba camino a su casa, ubicada en la colonia La Asunción, alcaldía Tláhuac, pero murió tras el desplome del tren en la Línea 12, la cual usaba en lugar de su camioneta para evitar el tránsito.

Hace dos días, su hijo compartió a través de redes sociales un mensaje en memoria de su padre expresando que su deceso «no es un adiós, es un hasta pronto».

«De verdad que tú fuiste, eres y serás por siempre la única persona a la que siempre pude mirar a los ojos fijamente, sin quitar la mirada. Te agradezco demasiado por haberme apoyado en todas mis decisiones; algunas malas, otras buenas, pero siempre me apoyaste. Te agradezco por haberme cuidado mucho. Te quiero demasiado (…) Me da mucha tristeza que no me verás ser el licenciado que siempre quisiste que fuera, pero lo haré en tu honor porque sé que siempre estarás viéndome y estarás conmigo. No es justo, que por algo que no fue tu culpa tú te tengas que ir. De verdad te voy a extrañar demasiado. Gracias por todo. Te amo papá», expresó.

En tanto, agradeció a las personas que lo ayudaron aquel día a buscarlo entre tantas víctimas.

«Quiero agradecerles a todos los que me ayudaron en esta búsqueda, de verdad, en compartir, y hacer todo lo posible por encontrarlo se los agradezco demasiado», manifestó.

Nos ha costado el saber que ya no está: hermano de Angélica Segura

A un año del desplome de un tramo elevado de la Línea 12, Christian Segura Osorio recuerda a su hermana Angélica Segura Osorio como una «persona muy noble, trabajadora» y que siempre vio por el bienestar de su familia.

Christian relató a MILENIO que ha sido «duro» afrontar la pérdida de su hermana, pues «el saber que ya no está nos ha costado».

Angélica tuvo dos hijos. Una mujer de 26 años, quien vive con su familia, y un joven de apenas 18 años, quien vivía con su madre en casa de sus abuelos.

«Ha sido difícil porque ellos eran muy apegados a su mamá, en todo momento siempre estaban con ella, comían, la esperaban del trabajo para cenar. Ha sido difícil para ellos soportar su ausencia», reconoce.

Christian, el menor de dos hermanos, cuenta que Angélica siempre fue una persona servicial y atesora los momentos vividos con ella.

«Todo el tiempo, la recordamos, yo en lo personal, tengo muchas vivencias, experiencias ya que como era mi hermana mayor, desde pequeño siempre me crie con ella, ella me cuidaba, nos daba de comer porque igual mi mamá trabajaba y ella nos cuidaba como hermanos menores», resaltó.

La labor de ayuda nata de Angélica trascendió a los cuidados de sus padres, quienes hoy en día son adultos mayores que sufren ante la ausencia de su hija, y por ello, Christian reclama que hasta el momento, el gobierno de la Ciudad de México no se haya acercado a sus padres a ofrecerles apoyo, pues también se han visto afectados debido a que Angélica era su principal soporte.

Ante las labores de rehabilitación del tramo elevado, hizo un llamado a que se rehabilite toda la línea pues «no me gustaría que alguna otra familia tenga algún tipo de acontecimiento como esta vez que por las malas condiciones del Metro haya un choque o que se vuelva a caer»

«A mí no me gustaría que otras personas o hasta a nosotros mismos nos llegue a pasar algo también por las malas condiciones de este servicio. No me gustaría que alguien pase por las mismas condiciones de este servicio», dijo.

Este martes 3 de mayo la familia realizará una misa en honor a Angélica y el miércoles acudirán al panteón para visitarla y dejarle arreglos florales.

MILENIO trató de contactar a los familiares del resto de las víctimas que fallecieron en el incidente, sin obtener respuesta.

José Luis Hernández Martínez

Algunos de ellos, fueron los familiares de José Luis Hernández Martínez, quien formaba parte de una familia de seis hermanos; sus papás eran originarios de Orizaba, Veracruz, pero en la Ciudad de México se instalaron en una vecindad cerca de la estación del Metro Puebla.

Hasta el 3 de mayo de 2021, día del colapso en la Línea 12 del Metro, José Luis Hernández fue pintor-hojalatero.

El 9 de abril, en su cuenta de Facebook, Luis Hernández compartió un fragmento de un monologo del comediante Franco Escamilla que hace referencia a honrar a los seres queridos que han fallecido haciendo alusión a “su viejo”.

Evaristo Lucas Santiago

El señor Evaristo Lucas Santiago era parte de los cientos de usuarios que la noche del 3 de mayo de 2021, que viajaban en el tren que se cayó al pasar por el tramo elevado entre las estaciones Olivos y Tezonco.

Desde el día de los hechos y tras darse a conocer su nombre en la lista de víctimas mortales, se documentó que tenía 56 años.

De él se desconoce alguna información de su familia o amigos que dé cuenta de cómo ha sido la vida en familia desde el incidente y si el hombre recibió algún homenaje.

Carlos Emmanuel Pineda Bernal

Carlos Emmanuel Pineda Bernal, tenía 38 años y era odontólogo de profesión,  poco antes del incidente se había unido a la Guardia Nacional.

Cuando abordó el tren que cayó del tramo elevado de la Línea 12 se dirigía a su casa, donde lo esperaban su esposa y sus dos hijos.

Santos Reyes Pérez

Santos Reyes Pérez trabajaba como albañil para mantener a su familia, conformada por su esposa y dos hijos, con quienes vivía en el municipio de Valle de Chalco, Estado de México. El día del accidente, casualmente se festejaba a los trabajadores de la construcción.

Immer del Águila Pineda

Immer del Águila Pineda, era un joven de 29 años, ingeniero en Sistemas y que trabajaba en la aduana del AICM.

Vivía en San Andrés Mixquic, Tláhuac, tenía dos hermanos y su principal motivación para salir a trabajar era darle una mejor vida a sus padres. Era fiel seguidor de los Diablos Rojos del Toluca.

José Juan Galindo Soto

José Juan Galindo Soto tenía 34 años y se dedicaba a la albañilería. El 3 de mayo del 2021, fue día de la Santa Cruz  y aprovechó que descansaba  para ir al dentista, acompañado de su esposa Evelyn. Ambos fueron en su coche color vino.

De regreso a su casa, la pareja circulaba sobre la avenida Tláhuac al momento del desplome de la trabe, por lo que “el Metro les cayó encima”.

Evelyn fue rescatada y llevada a un hospital, mientras que José Juan falleció dentro de su auto.

Liliana López García

Liliana López García era gerente en una tienda de ropa en la plaza Forum Buenavista, la noche del 3 de mayo del 2021  hacia su casa para cenar con su hijo Yahadit, de 14 años, a quien antes del accidente le dijo que compraría comida para que comieran juntos.

Sin embargo, el desplome en la Línea 12 impidió que llegara a su destino. Era originaria de Veracruz y su pasión era estar con su familia y conocer Pueblos Mágicos; el último viaje que realizó para visitar alguno fue a Presidio, en Tezonapa.

Cristian López Santiago

Cristian López Santiago, de 41 años, era abogado y trabajaba en el Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social.

La noche del accidente había llamado a su esposa para informarle que iba de regreso a casa, donde además de ella sus dos hijas de 13 y 7 años lo esperaban.

Miguel Ángel Vázquez Castellanos

Miguel era un joven de tenía 24 años que trabajaba en la industria de la construcción, realizando instalaciones eléctricas, oficio al que se dedicaba para mantener a su pequeña hija.

Era originario de Valle de Chalco, en el Estado de México, donde vivía con sus padres y su hermana Berenice. Al joven, quien en redes sociales se identificaba como Pantera, le gustaba salir con sus amigos y escuchar  reguetón.

Juan Luis Díaz Galicia

Juan Luis  tenía 39 años y trabajaba como chofer en Coyoacán. Normalmente no usaba la Línea 12 para regresar a su casa en la colonia Tierra y Libertad, alcaldía Tláhuac.

El 3 de mayo fue una de éstas pocas ocasiones, pues viajaba en los dos últimos vagones del tren, que quedaron suspendidos tras el desplome del tramo elevado.

Meliton Velasco López

Tenía 48 años y era albañil. La mañana del 3 de mayo del 2021 se despidió de su esposa, Adela Herbert, y salió de su casa, en el municipio de Chalco, Estado de México, junto a sus hijos, Adán y José, para dirigirse a su trabajo en la Ciudad de México.

Ese día, celebró el Día de la Santa Cruz junto con su patrón y por la noche se subió al Metro para volver a casa; iba en el vagón que se desplomó entre las estaciones Tezonco y Olivos. Melitón murió, mientras que sus dos hijos resultaron heridos.

Idelfonso Barrios Castañeda

Idelfonso tenía 47 años y la noche de la tragedia viajaba en el tren de la Línea 12 porque se dirigía a su casa, ubicada en San Andrés Mixquic.

Sergio Valentín Rodríguez

Padre y esposo de 61 años, quien el 30 de abril de 2021 ingresó a trabajar en los servicios de limpieza de los baños de la estación Tezonco para tener más ingresos luego de que se dedicara a vender muéganos.

Su pareja Guadalupe Salas, le dejó comida a las 15:00 horas en día del accidente. “Te vas con cuidado, flaca”, le dijo a ella, una de las pocas personas cercanas que sabía de su empleo en el sistema de transporte.

Gabriela Ramírez

Gabriela tenía 27 años y fue la última víctima en ser identificada, luego del accidente en la Línea 12 del Metro. La noche del incidente se dirigía a su casa para ver a su hijo Yael de cuatro años, pero el desplome del tren  evitó que recibiera la tarjeta sorpresa que su pequeño le preparó con sus propias manos y que le entregaría para el Día de las Madres.