* Vale mucho la pena luchar por la gente pequeña 

 

* Indica que fue una gran experiencia nadar con Tiburones 

 

* Mi madre está muy contenta con lo que hago, señala  

 

Por René Valdivia Guzmán/Segunda de tres partes

Xalapa, Ver., 07 de abril de 2022.- Al gran atleta veracruzano –ya retirado- de Poza Rica, Germán Silva, se menciona que le dijeron varias veces que no servía para el atletismo pues era muy bajo de estatura, incluso, le llegaron a sugerir que se dedicara a otra cosa, incluso, tenían dudas que pudiera competir en la prueba de steeplechase (tres mil metros con obstáculos), pero nada lo detuvo.

Qué pasó, simple: ese corredor rompió la pista y la calle, se batió con la élite mundial del atletismo, ganó maratones, algunos de los más prestigiados como el de Nueva York, se dio con todo con fondistas africanos, rompió récords, algunos todavía existentes, es decir, no los han roto, pero todo eso lo consiguió con coraje, determinación y carácter.

Así Jacob Zayas García se ha enfrentado a la vida diaria, lejos de conmiserarse ha sacado energía, chispa e inteligencia para salir adelante y librar los obstáculos que se ha encontrado en el camino.

Innegable, no es monedita de oro –él lo admite-, hay quienes le reconocen su labor, otros le critican por haber estado como funcionario municipal o simpatizar con alguna corriente partidista o laborar con “x” o “y” persona, pero es parte de su desempeño profesional.

Les presentamos esta segunda parte de la entrevista con Jacob Zayas García.

– Jacob: ¿Vale la pena luchar por la gente pequeña? 

“Vale muchísimo la pena, yo le digo a todo el mundo, ya hemos casado a dos parejitas de gente pequeña, la última fue en Córdoba, ya hasta tuvo un hijo, los dos pequeños, de talla estándar, y ya se conocieron.
 
Se siente algo tan bonito el verlos como se empiezan a desenvolver, que estaban metidos en su nube de discriminación, en su capsula, porque lamentablemente las familias por defenderlos los encapsulan, pero desafortunadamente ellos no saben qué es que se burlen de ellos, que no puedan subirse a la silla y darse cuenta de que empiezan a seguir los ejemplos de los otros compañeros.

Hay compañeros que están haciendo ejercicio como mi amigo el fisicoculturista, muchos le están echando ganas en el trabajo, otros ya empiezan a interactuar con la sociedad, sí vale la pena, vale muchísimo la pena porque son personas que son muy emprendedoras, muy hábiles, y te das cuenta que donde hay una gente pequeña todas las personas tienen que ver con ellos, todos los conocen, en sus municipios son conocidísimos».

–  Actualmente eres muy conocido a nivel estatal y nacional, ¿te buscan personas de familias que tengan algún pequeño en casa o algún familiar con estatura pequeña para pedirte consejos, asesoría, para integrarse a tu asociación? 

 “Así es, has dado en el clavo, mucha gente, tenemos un porcentaje en la asociación estatal y nacional, hay personas que no están activas pero que están ahí para ver cómo se les ayuda. Todavía no interactúan porque es complicado, por ejemplo: otro golpe complicadísimo para una persona pequeña es ver a otra persona pequeña, porque a nosotros nos pasa un efecto de que mimetizas con el ambiente, a tal grado de que yo me siento como tú, yo me siento alto, porque tú me tratas bien”.

No tiene nada de malo ser pequeño  

Jacob Zayas apunta que no tiene nada de malo ser pequeño, sin embargo, recalca que sí hay diferencia con gente de “tamaño normal”, pone un ejemplo: “qué pasa cuando ves a una persona pequeña, pues viene el impacto visual, ¿a poco así me veo de chiquito? ¿Así me veo de gordo?¿A poco así camino?, remarca que la gran mayoría de gente pequeña tienen las piernas curvas, nuestra manera de caminar diferente con respecto a alguien de tu tamaño.

Se camina como charrito, yo no sabía que caminaba así, yo pensé que caminaba normal, entonces un día me enseñan un video caminando y hasta yo me reí de mí mismo, es un problema muy fuerte en donde las personas dicen: cómo le hago, cómo hago bien esto, como hago bien el otro, porque hay mucho desconocimiento, a tal grado de que muchas veces ni siquiera saben sus problemas reales de salud».

– ¿Qué le dices a tus críticos?, o a quienes dicen que tú no eres una buena persona o que cuando tienes poder se te sube a la cabeza y eres diferente a cuando no tienes algún cargo.

“Primero que me conozcan, de ahí les mostraría lo que hemos hecho, el trabajo que hemos realizado es muy palpable, nadie sabía de gente pequeña hace dos años, nadie sabía de esto, tenemos 53 municipios en la asociación, más de 200 familias incluidas y más de 500 personas que nos han estado apoyando porque logramos una asociación de amistad para que nos ayuden a la gente pequeña”.

Zayas García muestra rechazo y ataja que no es mala persona, sin embargo, subraya: “les ofrezco el beneficio de la duda, porque no a todos les puedo caer bien, yo sé que a mucha gente no le puedo caer bien, pero les agradezco que se tomen el tiempo de dar su opinión, ojalá me pudieran conocer más a fondo, yo he tenido un solo cargo público, he tenido muchos trabajos y hasta ahorita pues no he tenido ningún problema público fuerte».

Prosigue: “hay personas que les caes bien y personas que les caes mal, sin embargo, les agradezco su tiempo, su sinceridad y sobre todo yo les pediría que me dieran la oportunidad de seguir chambeando porque el trabajo mata grilla, no soy perita en dulce, eso sí, tengo mi carácter, pero yo les agradezco mucho su tiempo y les pido que me conozcan a fondo”.

– ¿Te gusta la política? 

 Sí, me gusta mucho.

– ¿Has pensado en alguna ocasión tener un cargo de elección popular? Regidor, diputado, ¿te gustaría? 

 “Pues mira, ahorita estamos en el tema de las gestiones, en el tema de la representatividad, obviamente si lo estamos haciendo en una asociación civil, que mejor que tener oportunidades más fuertes de apoyar a los que menos tienen y obviamente esos cargos son a la par de, yo soy abogado, y sí me gustaría mucho tener la oportunidad algún día, no le voy a decir que no, si se presentara la oportunidad claro que sí, porque ahí nos pondríamos más las pilas.

Ahorita tengo una asociación civil, yo se lo debo a mis amigos, le debo esto a todas las personas que han confiado en mí, hasta a la misma gente pequeña que apoyan con una foto, con el respaldo, los compañeros que dicen: te apoyo con esto, los que están confiando en mí, se los agradezco mucho, y creo que algo así nos beneficiaría más para apoyar al movimiento y para apoyar a más discapacidades y a otros sectores que lo requieren”.

– ¿Qué te dice tu mamá, Jacob, se siente orgullosa de ti?  

 “Pues está muy contenta, obviamente yo le agradezco, doy gracias a Dios por tenerla a ella, porque sin ella yo creo que no hubiera logrado esta autoestima que tengo, porque no soy guapo, no estoy delgado, soy gordo, y esta facilidad de palabra no la tenía yo de antes, fue por practicar, y yo le doy muchas gracias al Señor porque ella siempre me mantuvo y aún en día me mantiene a raya.

Ella está muy contenta, está muy satisfecha porque estoy ayudando a otros, y porque ella lo padeció, desconocía mucho y ahora abordamos el tema de la gente pequeña”.

Nadar con Tiburones ¿qué te dejó? 

«Me dejó primero una experiencia exorbitante, de otro nivel, muy contento de la oportunidad que medio Shark Tank de ir a presentar un proyecto, también de ver a gente de nivel internacional que desconociera a las personas de talla baja y que no conocieran un proyecto como el mío, me llevaron al espacio.

Valió la pena ir más de cincuenta veces a Naolinco, valió la pena arriesgarse y valió la pena estar ahí noche y día investigando, tomándole medida a toda mi gente pequeña y sigue valiendo la pena porque fuimos hasta León a hacer realidad todo esto y además pusimos el tema de la gente pequeña a nivel Latinoamérica», relata.

¿Te han buscado de otros países? 

«Sí amigo, ahorita hay otros países, hay cuatro naciones de gente pequeña que nos han buscado para el tema del calzado y para empezar a trabajar en conjunto para la gente pequeña».

¿Algún medio de comunicación de otro país te ha buscado? 

 Al principio si fueron varios, fue un boom cuando salió el programa, todo el mundo nos empezó a hablar, a felicitar, a pedir entrevistas y todo, fue algo que no tiene precio y eso se lo agradezco también a la gente pequeña que ha tenido confianza en mí, porque sin ellos no hubiera hecho la empresa de zapatos”.

El próximo domingo publicamos la tercera y última parte de la entrevista con Jacob Zayas García.