Muy alta la factura que comienza a pagar el secretario de Gobernación por un fin de semana dedicado a saltarse las trancas con respecto a la Revocación de Mandato.

El funcionario, agazapado, espera el golpe de las denuncias en su contra, varias de ellas por faltas graves, como el uso de un avión militar para proselitismo partidista, conducta que hasta el propio presidente rechazó.

¿Había necesidad de exponerlo?

Ninguna necesidad. El daño se expande. A nadie sirve perder al único interlocutor entre la oposición y el gobierno. El clima de crispación es dominante. Después de más de seis meses en el cargo el secretario tendrá que comenzar de nuevo.

La oposición tratará de sacarle todo el provecho al traspiés del secretario, el diálogo dejó de interesarles.   |  Se destaca en “Pepe Grillo” de La Crónica.