Mientras en Estados Unidos el gobierno de Joseph Biden anunció medidas concretas para la comunidad trans, en México el día de la visibilidad acabó con un sainete en la Cámara de Diputados. Nos cuentan que luego de que Gabriel Quadri decidió seguir su disputa con la diputada Sandra Luévano y le llamó “señor”, su compañera María Clemente llevó la protesta hasta la tribuna y hubo jaloneos y empujones al panista Santiago Creel, quien presidía la sesión y le tocó pagarla sin deberla ni temerla. Nos hacen ver que, cosa rara en esa cámara, hubo consenso de todos los grupos parlamentarios de que no tendría que haberse llegado a eso y, cosa aún más rara, todos los coordinadores ofrecieron disculpas por lo ocurrido. Incluso en la bancada morenista que coordina Ignacio Mier, nos dicen, hubo un fuerte regaño para Clemente, quien de plano se declaró independiente en respuesta. Nos cuentan que entre Mier y Clemente había diferencias previas, por aquella postura de la legisladora a contrapelo de su partido para exigir recursos para el tratamiento de personas con VIH, que estuvo a punto de tumbarle al coordinador la aprobación de la miscelánea fiscal para 2022. ¿Será que el día de la visibilidad trans sirvió de pretexto para saldar viejas rencillas internas?   |  Se puede leer en “Bajo Reserva” de El Universal.