El que no halla a quién más responsabilizar de la incontenible crisis de inseguridad en su entidad es el gobernador de Zacatecas, David Monreal, porque ahora resulta que los responsables ya no son ni Dios ni los que le precedieron en el Ejecutivo estatal y le dejaron una “herencia maldita”. Resulta que ahora son los medios de comunicación, a los cuales acusó de ser “promotores de las organizaciones criminales” y de “intimidar a la gente”. Sólo porque éstos cumplen con el trabajo de dar a conocer los resultados de una estrategia de seguridad que a decir de muchos zacatecanos y de las propias cifras de incidencia delictiva, deja mucho que desear. No suficiente con lo anterior, el mandatario remató en su conferencia recomendando a los medios que asuman su responsabilidad, pero ahora la pregunta que muchos se hacen es: ¿Él cuándo asumirá la suya? Pobre Zacatecas.   |  Se lee en “Rozones” de La Razón.