* El cantante conocido por canciones como “118 balazos” fue atacado en Tijuana. Uno de los balazos impactó en su rostro

INFOBAE

Gabriel Soto Gastélum, conocido por sus corridos a líderes del narco y sus experiencias extremas, falleció a los 55 años este 16 de marzo tras luchar por su vida desde el atentado que sufrió el pasado enero en Tijuana.

El Tesoro de Sinaloa, como era conocido Soto, fue baleado el pasado 22 de enero en Tijuana, Baja California, mientras estaba en el taller mecánico El Socio 1. Se sabía que él era un cliente frecuente, pues su camioneta Ford tenía fallas. Durante una de sus muchas visitas, fue interceptado.

Eran alrededor de las 15:00 horas cuando él se subió a su vehículo, una persona llegó y abrió fuego contra él, huyendo inmediatamente por la vialidad más cercana. De los balazos que recibió, uno impactó contra la cabeza del cantante, directamente en su rostro. Desde entonces, su familia reportó que su salud era muy delicada.

El local fue rápidamente resguardado por la Policía Municipal de Tijuana, así como por activos de la Guardia Nacional. La camioneta Ford 79 con la que siempre se fotografió y que fue mencionada en varios corrido, fue una de las partes más importantes de la escena. Según reportó en su momento el diario local Punto Norte, la Fiscalía General del Estado habría localizado en la escena, por lo menos, nueve casquillos de arma calibre 9 milímetros.

Amigos y familiares de Soto compartieron fotografía de su funeral, confirmado su muerte (Foto: Captura de pantalla de YouTube/ Paisa Power Musik)
Amigos y familiares de Soto compartieron fotografía de su funeral, confirmado su muerte (Foto: Captura de pantalla de YouTube/ Paisa Power Musik)

Soto era atendido en un hospital neurológico en Guadalajara, Jalisco, a donde fue trasladado rápidamente debido a la gravedad de su salud. En el mismo nosocomio falleció tras dos meses de luchar por su vida. A través de redes sociales, amigos y familiares comenzaron a despedir a El Tesoro de Sinaloa desde el 16 de marzo, pero la noticia trascendió hasta este 21 de marzo.

Con fotografías de su juventud, de sus conciertos, así como memorias de sus hazañas en la música, sus seres queridos le han dado un último adiós.

Gabriel Soto se popularizó por cantar narcocorridos. Ganó popularidad en la década de los 90 con varios temas inspirados a los capos. No obstante, una de sus canciones más famosas, y que tomó más relevancia tomaron después del ataque que sufrió en enero, fue una en la que relataba las ocasiones en que tuvo experiencias cercanas a la muerte, 118 balazos. Sus versos narran cómo sobrevivió a tres altercados, recibiendo una gran ráfaga de balas, pero ninguna letal.

"El Tesoro de Sinaloa" era famoso en el norte del país, donde habría sufrido de otros tres atentados antes (Foto: Facebook/Gabriel Soto)
«El Tesoro de Sinaloa» era famoso en el norte del país, donde habría sufrido de otros tres atentados antes (Foto: Facebook/Gabriel Soto)

La fama de El Tesoro de Sinaloa fue tal que Valentín Elizalde también llegó a cantar dicha canción, siendo también uno de sus éxitos. “Ya me he salvado tres veces de una muerte segurita, con puro ‘cuerno de chivo’ me tiraron de cerquita. 118 balazos ni Diosito me los quita”, dice uno de sus versos.

Según recuperaba en su corrido, dos de los tres ataques los habría sufrido en Tijuana, mientras que otro en Ensenada.

Entre algunos de los personajes que Gabriel Soto mencionó en sus temas está Amado Carrillo Fuentes, mejor conocido como El señor de los cielos, quien fuera la mente maestra de la actividad delictiva tijuanense.

Autoridades no dieron a conocer si la emboscada que sufrió el cantante fue una ligada a sus narcocorridos, tampoco hubo alguna célula delictiva que se adjudicó el ataque. Pese a que supuestamente hubo varios testigos de la emboscada y habrían dado a conocer particularidades del atacante, no se reportaron detenidos.