Cuánta razón tiene el alcalde xalapeño, al precisar que ningún funcionario, empezando por el alcalde, es indispensable para que la administración pública funcione, pues sólo se requiere de una ciudadanía participativa que sea escuchada a la hora de generar políticas públicas en beneficio de todas y todos.  

Las declaraciones vienen a colación por los cambios en el organigrama municipal donde recientemente destacó la salida de Ivonne Quirarte Mora de la Dirección de Turismo, mujer empresaria a la que el propio alcalde le reconoció su capacidad y dominio del tema, y de quien dijo se respeta la decisión personal de salir del Ayuntamiento, aunque se espera seguir contando con su apoyo como ciudadana.  

Lo cierto es que en estos más de 40 meses que quedan por delante, la administración no será un tema de amiguismos o “cuates”, sino de esfuerzos conjuntos con la sociedad, pues se trata de un gobierno en el que cabe todo aquel que quiera sumar para resolver los problemas de una ciudad que es de todas y todos los xalapeños. 

Recordemos, Ahued Bardahuil es una persona congruente, toda una garantía de buenos resultados.