Ante la contraloría interna del Congreso del estado de Hidalgo fue ingresada una queja por maltrato y despido injustificado, atribuido a la diputada local de Morena, Sharon Macotela Cisneros. El afectado narró que se desempeñaba con una plaza de confianza nivel 8C, cubriendo el puesto de jefe de oficina adscrito a la dirección de Comunicación Social. Lo grave es que la legisladora “me solicitaba que me robara las aguas y galletas de las salas de junta, así como pedirme que fuera a escuchar las pláticas de otros diputados, actividades a las cuales yo no accedí y por eso ella, su hermano y Alberto Fabela me llamaban ‘coyón’, ‘cobarde’, ‘chismoso’”, reveló… ¿En qué parte de los postulados del partido dice que hay que conducirse así? | Se detalla en “Frentes Políticos” de Excelsior.
