Nos cuentan en la cuarta mesa de diálogo con colectivos de búsqueda, la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, escuchó a las activistas y familiares de desaparecidos cuando le exigían que renuncie la presidenta de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra, y les dejó claro que ella no puede pedirle la renuncia a la titular de un organismo autónomo, pero destacó que “tanto las víctimas como los periodistas, se dan cuenta de quién trabaja y quién no”. Por si hubiera dudas, hizo un comentario en el sentido de que la Secretaría de Gobernación ha cumplido con invitar a los organismos autónomos involucrados y remató: “ya ellos deciden si atienden y cómo atienden”. La pedrada, sin duda, llegó a su destino. | Se puede leer en “Bajo Reserva” de El Universal.
Una pedrada para Rosario Piedra
